MADRID, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Sindicato de Enfermería, SATSE, advierte de que la nueva Formación Profesional sociosanitaria ha generado un rechazo unánime entre la profesión enfermera de España(colegios profesionales, sociedades científicas, directivos, estudiantes...) por entender que perjudica y pone en riesgo la atención y cuidados que deben recibir las cerca de 400.000 personas mayores que viven en centros sociosanitarios.
Asimismo, considera que las muestras de apoyo público de distintas organizaciones del sector sociosanitario privado a la nueva titulación de Formación Profesional sobre la supervisión de la atención que se presta en las residencias constatan su interés de contar con personal mucho más barato y, con ello, poder incrementar sus beneficios empresariales a costa de la calidad y seguridad de la atención a las personas mayores.
Como ha venido denunciando SATSE desde el primer día que se conocieron los pormenores de la nueva titulación de FP, los empresarios privados del sector de las residencias de mayores ya se están "frotando las manos" por el negocio que podría suponer el poder contratar a trabajadores a un menor coste, aunque éstos no tengan la formación y cualificación necesaria, salvo que el proyecto de esta titulación sea reorientado sustancialmente y proteja la atención sanitaria y cuidados al mismo tiempo que salvaguarde el espacio competencial de los profesionales de Enfermería y Fisioterapia.
Hasta la fecha, al menos, distintas patronales del sector privado de Cataluña, Euskadi y Andalucía ya han manifestado públicamente su apoyo a esta nueva titulación y todo apunta, según SATSE, a que no serán las últimas, ya que la nueva titulación les permitiría contar en las plantillas de sus centros con trabajadores a los que pagar menos por sus servicios, aunque se degrade y debilite la calidad y seguridad de la atención a los mayores.
Además de conllevar una peor calidad de la atención y mayores riesgos para las personas mayores que han hecho de este tipo de centros su hogar, SATSE rechaza que se quiera implantar una figura laboral no sanitaria para controlar y tutelar a profesionales sanitarios que, como es el caso de las enfermeras y enfermeros, están perfectamente cualificados, tras cursar cuatro o seis años, según el caso, de e0studios universitarios. "El proyecto de esta nueva titulación requiere una nueva valoración y reajuste en los espacios sanitarios y competenciales de los profesionales de Enfermería y Fisioterapia", añade
De igual manera, el Sindicato reitera que esta nueva titulación vulnera competencias profesionales propias de las enfermeras y otros profesionales, además de legislación fundamental y específica del ámbito sociosanitario. "Es absolutamente incomprensible que una titulación de Formación Profesional que va a requerir únicamente de 600 horas lectivas vaya a supervisar y coordinar la labor asistencial y de cuidados de profesionales sanitarios que tienen una titulación universitaria de Grado", señala.
Por ello, la organización sindical se inclina a pensar que el desconocimiento del espacio sanitario por parte de quienes han elaborado el proyecto de esta nueva titulación de FP ha sido el causante del "tremendo desacierto" en el contenido del mismo