La Comisión Gallega de Bioética concluye que "no es admisible" prescribir un medicamento equivalente de precio más elevado
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Sanidad ha subrayado que el catálogo priorizado de productos farmacéuticos permite un ahorro "un 60 por ciento mayor" que la orden de precios de referencia del Ministerio de Sanidad que entró en vigor este martes, ya que esta iniciativa "no afecta a las marcas más caras" que, matiza la Xunta, "se mantendrán en el mercado sin ver afectado su precio".
Además, la Xunta destaca que Galicia "acumula unos 96 millones de euros de pérdida de ahorro" debido al "retraso" desde que esta orden fue aprobada por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud --en una reunión celebrada en mayo del año pasado-- hasta su entrada en vigor.
"La Xunta ha solicitado en numerosas ocasiones al Gobierno central que adopten las medidas de su ámbito competencial que potencien y salvaguarden la sostenibilidad del sistema sanitario español y lo blinden ante el impacto de la crisis económica en lo que se refiere a prestaciones sanitarias", expone en un comunicado.
Al respecto, la Comisión Gallega de Bioética considera "necesario" que la Administración sanitaria desarrolle políticas activas "para racionalizar el mejor uso de los medicamentos, limitando el número de especialidades farmacéuticas, financiando selectiva y no indiscriminadamente según estudios de coste-efectividad, basados en la evidencia científica, en la necesidad de los fármacos y en un precio adecuado".
'ÉTICA NA PRESCRIPCIÓN'
Así se recoge en el informe 'Ética na prescripción', aprobado en la última reunión de este organismo. "La buena práctica clínica en prescripción que se consigue cuando el médico bien formado, y en uso de su libertad, selecciona el medicamento óptimo para su paciente al menor coste posible. Éticamente no es admisible prescribir un medicamento equivalente de precio más elevado", recoge el texto.
En él también se sostiene, según señala Sanidad, que "no se demostró" que "el número infinito de fármacos en el mercado dé lugar a mayores beneficios para la salud pública que un número limitado de productos", y se señala que en los últimos años la tasa de innovaciones ha disminuido, con un aumento de "medicamentos réplica" que "aportan poco o ningún beneficio terapéutico" y que son, añade, "los que más gasto suponen para el sistema público".
"El uso racional de recursos es lo que consigue la satisfacción de una necesidad del usuario con menor coste posible. Todo esfuerzo, dinero y tiempo así ahorrados redundará en el beneficio de los pacientes, sin perjuicio de la ganancia directa para el paciente que se deriva de la eficiencia", sostiene el documento.
Por último, el informe de la Comisión Gallega de Bioética constata que la "sostenibilidad del sistema sanitario no sólo depende de las acciones de los gestores, sino del compromiso de los profesionales y de los ciudadanos". "Es obligación de todos hacer un uso racional de los recursos, así la sanidad pública podrá seguir respondiendo a las necesidades de salud sin que dependa de la capacidad económica del ciudadano", sentencia.