MADRID 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad asegura que hasta el momento sigue sin llegar a España ningún producto procedente de Japón que haya salido con fecha posterior al accidente nuclear de la central de Fukushima, el pasado 14 de marzo, si bien "en las próximas semanas" está previsto que lleguen las primeras mercancías y, por tanto, se activen los controles de radiactividad previstos.
Según informa el departamento de Leire Pajín, España importa "poco" de Japón. En concreto, las importaciones españolas de alimentos procedentes de ese país no llegan al 0,01 por ciento del total de las importaciones anuales de alimentos de España. En su mayoría se trata de pescado congelado pero, según aseguran, ningún barco español o europeo faena en la zona considerada de riesgo.
Pese a ello, tras el accidente nuclear de la central de Fukushima, que tuvo lugar tras el terremoto, España ha decidido multiplicar por cinco los controles de alimentos y piensos recomendados por la Comisión Europea, que se realizan a través de los Puestos de Inspección Fronterizos (PIF) y los Puntos Designados de Entrada (PED) de la Subdirección general de Sanidad Exterior.
De este modo, se decidió que las partidas que hayan salido a partir de la fecha del seísmo se someterán a un control físico, con análisis de los niveles de radiactividad, incluyendo los pescados procedentes de pesca capturada en la Zona FAO 61, que rodea Japón.
Estos controles incluyen la toma de muestras para determinar el nivel de radiactividad al 50 por ciento de las partidas (frente al 10 por ciento recomendado por la UE) de los productos procedentes u originarios de Japón, que posteriormente serán analizadas en el Centro Nacional de Sanidad Ambiental del Instituto de Salud Carlos III.
Asimismo, se solicitará determinación analítica de radiactividad, de modo que la aceptabilidad de los productos alimenticios se ajustará a lo establecido en los reglamentos EURATOM, en donde se establecen las tolerancias máximas para los productos alimenticios (unidades becquerels por kilogramo).
En caso de detectar en una muestra niveles de radiactividad superiores a los admitidos se rechazará la partida, según recuerda Sanidad, mientras que si se detectara niveles de radiación anormales se deberá comunicar de manera urgente e inmediata a la Subdirección General de Sanidad Exterior para que lo comunique a la red de alerta europea.
En el momento en que algún país detecte niveles de radiación anormales se pasará a analizar el cien por cien de estos productos.