MADRID, 30 Abr. (Reuters/EP) -
La terapia génica podría servir de tratamiento para las personas con insuficiencia cardiaca avanzada en un futuro, según ha evidenciado una investigación realizada por el Imperial College de Londres (Reino Unido).
En concreto, los científicos creen que este tipo de terapia podría ayudar a las personas con este tipo de dolencia "a bombear sangre de manera más eficiente". Por ello, planean inscribir a un grupo de pacientes en dos nuevos ensayos clínicos con 'Mydicar', un tratamiento de terapia genética realizada por empresa la compañía privada de biotecnología de Estados Unidos Celladon.
Así, y tras más de 20 años de investigación con este método innovador para la reparación de genes defectuosos, se empiezan a obtener resultados prometedores. Por ello, en noviembre pasado, las autoridades europeas aprobaron la primera terapia génica para enfermedades metabólicas.
Particularizando en la insuficiencia cardiaca avanzada, los expertos señalan que el objetivo es "insertar el gen SERCA2a directamente en las células del corazón usando para ello un virus modificado". A su juicio, la inexistencia de este gen hace que el bombeo de sangre en estas personas sea "cada vez más débil".
LOS FÁRMACOS NO RESTAURAN LA FUNCIONALIDAD DEL CORAZÓN
Para los pacientes, los fármacos "ofrecen cierto alivio", pero no restauran la función del corazón, lo que hace que su pronóstico sea "peor que el de muchos enfermos de cáncer", explican. Por ello, esta institución británica va a desarrollar este trabajo, que forma parte de un estudio en Fase II realizado sobre 200 pacientes.
Además, este verano se va a realizar un segundo, esta vez con dos docenas de pacientes ya equipados con bombas cardíacas mecánicas, y así "ver cómo puede ayudar este enfoque en esta situación particular", explican.
A juicio del director médico de la Fundación Británica del Corazón (BHF, por sus siglas en inglés), que es cofinanciadora de este último ensayo, el doctor Peter Weissberg, estos experimentos son "un gran ejemplo" del potencial de este tratamiento clínico.
Por su parte, el autor principal de la investigación y miembro del Imperial College de Londres, el doctor Alexander Lyon, añade que la terapia génica "podría ser coste-efectiva". Se evitarían intervenciones, "como los trasplantes de corazón", concluye.