Pide un aumento del presupuesto de un 20% para determinadas partidas en 2019 y que sea sostenido para los próximos tres o cuatro años
MADRID, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la asturiana Rosa Menéndez, ha afirmado que la ciencia española "no se está muriendo", como se ha sostenido desde la comunidad científica en varias ocasiones, sino que, por el contrario, se encuentra "muy viva". No obstante, avisa de que "la ciencia está en riesgo si no se toman medidas".
En este sentido, ha insistido, en una entrevista con Europa Press, en que son la gestión y las trabas administrativas "el primer escollo" que se ha de "salvar", las cuales no afectan solo al CSIC ni al sistema científico español, sino a "toda la Administración Pública, en general".
"La parte administrativa sigue estando, no diría que burocratizada, pero sí sigue siendo demasiado lenta; en algunos aspectos estamos razonablemente bien, pero necesitamos ir más allá", ha lamentado la química, que resume los retos de su presidencia en convertir al CSIC en una institución "atractiva" y "deseada" para los científicos, tanto para los que se fueron al extranjero como para los que se encuentran en España. "Poco a poco nos estamos moviendo, pero no con la celeridad con la que me hubiese gustado", reconoce.
Para la máxima responsable de la institución, la "problemática" que tiene el sistema científico español actualmente "es más compleja" en el CSIC dado su gran tamaño (más de 11.000 personas trabajan en el organismo, que está compuesto por más de 120 centros de investigación). "Sería una lástima no mimar y no potenciar al CSIC en el amplio sentido de la palabra, y no darle un sistema de gestión adecuado que le permita ser eficiente y crecer, pues todo lo que crezca el CSIC va en beneficio del país, de la sociedad y de todos los españoles", ha señalado Menéndez, que define a la institución de "buque insignia" de la investigación en España.
ESTABILIZACIÓN DE TRABAJADORES
Sobre la contratación temporal del personal investigador en España, Menéndez ha comentado que se está estudiando y negociando con el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y con los de Hacienda y Función Pública junto con los sindicatos un programa para estabilizar a aquellos investigadores que han concatenado contratos temporales durante cierto tiempo. Según la doctora, en el caso del CSIC se está analizando centro por centro para valorar cada situación y ha anunciado que "va a haber soluciones de inmediato en determinados casos".
Otra de las reivindicaciones de la presidenta es el aumento del presupuesto para la institución. "Necesitamos un mayor apoyo económico porque los centros han funcionado relativamente bien en los últimos años con el esfuerzo de años anteriores, pero si ahora no hay una inversión decidida, a nivel de renovación y ampliación de equipos o de solución de problemas estructurales dentro de los propios edificios e instalaciones, sería imposible mantener el ritmo que tiene el CSIC a nivel de producción científica", ha relatado.
Menéndez pide incrementar el presupuesto "como mínimo" un 20% en determinadas partidas para 2019, aunque entiende "que no se pueden hacer subidas categóricas en un año". Igualmente, dice que "sería lo ideal" que, paulatinamente, en los próximos tres o cuatro años, el CSIC alcanzara una subida sostenida que permitiera llegar a las cifras de 2008. "Eso me haría tremendamente feliz, sería respirar y no estar rebuscando", opina la presidenta, que insiste en que "es difícil trabajar bajo la presión de las limitaciones económicas" porque "la varita mágica no existe", y si el CSIC ha "sobrevivido" estos últimos años ha sido gracias a sus científicos y al apoyo de los gestores.
En cuanto a financiación privada, ha dicho que la institución está intentando potenciar a la empresa para que invierta en I+D+i, pues sostiene que el CSIC no quiere "depender únicamente de la financiación estatal", aunque ya más de un tercio de su presupuesto anual debe obtenerlo competitivamente. "El CSIC no se siente asfixiado, pero sí con la necesidad de ver un refuerzo", añade la primera mujer en presidir esta institución, que confiesa que su papel en el organismo es "facilitar" la vida a los investigadores y "conseguir apoyo económico al máximo".
"REPERCUSIÓN FAVORABLE" POR SER LA PRIMERA MUJER PRESIDENTA
Con más de ocho meses en el cargo, Menéndez asegura estar "razonablemente satisfecha" con la labor realizada hasta el momento en el CSIC. Además, valora la "repercusión favorable" que ha tenido, en general, el hecho de que por primera vez en la historia de la institución sea una mujer la que lo presida. "Ha llamado la atención, mucha gente que no se fijaba en el CSIC, gracias a eso, están mirando el CSIC, pero espero tener una mayor repercusión que esa", reconoce.
De hecho, sí que aprecia cambios desde su llegada en cuanto a una mayor implicación de las mujeres en áreas de gestión dentro del organismo. "Tengo voluntarias, en cuanto llamo para dirigir centros o delegaciones institucionales, hace unos años [las mujeres] quizá no hubieran aceptado y ahora están aceptando", agradece Menéndez, que confiesa que ninguna mujer le ha dicho que 'no' a sus propuestas. "Bueno, ni ningún hombre", añade.
A la pregunta de si, con su llegada, el CSIC se ha vuelto feminista, Menéndez responde que la institución siempre ha apoyado a la mujer y que fue "pionera" con la puesta en marcha en 2002 del Comité Mujer y Ciencia. Y se considera, a nivel personal, feminista, si eso significa tratar de favorecer y potenciar que sus compañeras del CSIC tengan oportunidades de poder desarrollar todo aquello en lo que son capaces. "Yo soy la animadora número uno de todas ellas", añade.
"ALGÚN CASO AISLADO" DE ACOSO SEXUAL EN EL CSIC
Preguntada sobre las recientes acusaciones de acoso sexual al reputado genetista español Francisco Ayala, Menéndez dice no conocer el caso en detalle. En cualquier caso, asegura que "no es bueno para la ciencia que haya noticias de este tipo, pero hay que ponerlas en contexto antes de juzgar a nadie; siempre beneficia a la ciencia las buenas noticias, no la controversia", ha comentado Menéndez, que pide ir "caso por caso" y ser "rigurosos" y "muy cuidadosos" antes de juzgar. Y afirma que ante este tipo de actitudes debe haber tolerancia cero.
Según la química, también ha habido casos en el CSIC, aunque se trata de "algún caso aislado". "No es habitual, hay un control, y tenemos un protocolo contra el acoso", avisa. Según explica, cuando el organismo detecta algún caso de esta índole, se hace una instrucción previa para comprobar si es cierto o no y, en caso afirmativo, se toman medidas disciplinares internas.
Menéndez dice ser "optimista" y ha valorado muy positivamente que el actual Gobierno haya creado un Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades con Pedro Duque al mando. "Es un signo de que valora la ciencia", pero aunque "los movimientos iniciales son totalmente positivos", dice que espera "resultados".
Preguntada sobre su futuro a raíz del reciente cambio de Gobierno, ha defendido que la presidencia del CSIC no está "politizada" porque en ningún momento, dice, le preguntaron sobre su ideología. "Y esto va en línea de que la investigación y la ciencia tienen que estar al margen de todos los vaivenes políticos", ha zanjado.