El tratamiento con células madre "tiene un futuro tremendo"
MADRID, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
Encontrar un consenso en la manera de emplear los tratamientos indicados contra la degeneración macular asociada a la edad (DMAE) es el principal objetivo del XVII Congreso Anual de la Sociedad Española de Retina y Vítreo (SERV) que se está celebrando este viernes y sábado en Madrid.
Así lo ha explicado el tesorero de esta sociedad científica, el doctor Alfredo García Layana, que sostiene que en la actualidad existen fármacos "muy eficaces y que controlan muy bien la enfermedad en la mayoría de los pacientes". Sin embargo, reconoce que el régimen de utilización "hace que, en la vida diaria, sea complicado emplearlo con la frecuencia que se requiere para obtener la seguridad de conseguir efectividad".
Por ello, sostiene que el interés de los expertos es "tratar de individualizar los tratamientos dependiendo de las características de cada paciente", ya que hay distintas pautas de terapia. Así, resume que lo que se va a hacer durante la reunión es "discutir cual es la mejor manera de usarlos".
La DMAE es una enfermedad "desconocida para muchos", por lo que si la gente no sabe que existe y que hay tratamiento, "muchas veces se llega tarde" al mismo, explica García Layana. Para él, aparte de conseguir que las personas la conozcan, es preciso "evitar sobretratamientos e infratratamientos para que la enfermedad no evolucione más".
Actualmente, un tres por ciento de las personas mayores de 65 años la padecen, lo que se traduce en "800.000 afectados en España que necesitan tratamiento prácticamente de por vida". Este último aspecto hace que el impacto socioeconómico sea "muy importante", el cual puede repercutir en los diabéticos, sostiene.
En este sentido, el experto señala que las personas que padecen diabetes "tienen mayor tendencia a tener enfermedades de la retina" por lo que es importante "que se hagan el fondo de ojo". Además, existen patologías retinianas, como los desprendimientos de retina o los agujeros maculares.
LAS NUEVAS TÉCNICAS PROVOCAN UNA MENOR AGRESIÓN AL OJO
La forma de tratar estas enfermedades ha cambiado sustancialmente en los últimos años, ya que las técnicas quirúrgicas han avanzado, repercutiendo en "una menor agresión al ojo, una recuperación más rápida y sin postoperatorio, y una mejora calidad de vida de los pacientes", subraya. "Se evita la angiografía invasiva y no se precisa pinchar al paciente", afirma.
En relación a ello, el vicepresidente de SERV, el doctor José María Ruiz Moreno, explica que las nuevas técnicas, como la tomografía de coherencia óptica, son "muy cómodas", ya que se realizan en pocos segundos y se consigue "información importante para saber si indicar o no cirugía". Además, permiten localizar "la presencia de líquido de edema o el acúmulo de sustancias que no deberían estar", señala.
Estos nuevos procesos "son mejores que el fondo de ojo", ya que también ofrecen la posibilidad "de saber la respuesta de un paciente a un determinado tratamiento", indica. Esto es así porque debido a su gran resolución, "se pueden identificar todas las capas de la retina", afirma.
Ruiz Moreno también se refiere a la DMAE, de la que asegura que el tratamiento indicado es "la inyección intravítrea con fármacos que bloquean la proteína que actúa de mediadora de la enfermedad y que es responsable de gran parte de las alteraciones de la retina". Actualmente, el médico puede elegir "entre una gran oferta" de medicamentos, entre los que se encuentra ranibizumab, comercializado por Novartis como 'Lucentis'.
Sin embargo, los expertos ya hablan de los tratamientos que vendrán, como el relativo a las células madre, que "tiene un futuro tremendo", manifiesta el secretario de SERV, el doctor José García Arumí. Aunque aún no hay resultados de los estudios que se han hecho en Fase I con pacientes, el experto sostiene que los realizados sobre animales ofrecen buenas perspectivas.
El objetivo es inyectar las células madre donde se encuentran las células que han sufrido degeneración en las capas más externas de la retina o en la que hay debajo de ella. Con ello se pretende que éstas "se reproduzcan y las suplan", confirma.
Por último, la presidenta de la sociedad organizadora del congreso, la doctora Marta Figueroa, reitera la importancia de que existan nuevas técnicas de tratamiento y diagnóstico. Así, y para concluir, destaca la relevancia de las inyecciones que se administran en el vítreo, las cuales "permiten resolver la enfermedad sin cirugía en un 40 por ciento de los pacientes".