Alrededor de un 35 por ciento de los niños vascos presentan escoliosis
BILBAO, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
Enfermos de escoliosis tratan de impulsar la constitución en País Vasco de una asociación de afectados, por lo que han animado a otras personas que padecen esta patología a unirse para poder hacer realidad esta iniciativa.
Promotores de esta iniciativa han explicado a Europa Press que la escoliosis, que supone la curvatura "anormal de la columna vertebral", afecta a un gran número de personas, fundamentalmente niñas y adolescentes.
Las mismas fuentes han indicado que, sin un tratamiento adecuado, la enfermedad puede llegar a "imposibilitar" realizar una vida normal y, en ocasiones, las complicaciones respiratorias, el dolor "persistente", además de la "baja" calidad de vida son "razones" para tratamientos quirúrgicos.
Según han precisado, en el conjunto del Estado únicamente existen asociaciones de afectados en Barcelona y en Valladolid, pero en el País Vasco no hay ninguna iniciativa similar.
A su juicio, una asociación puede ser una "ayuda" para los afectados con dolencias de espalda, principalmente, escoliosis, porque, además es una enfermedad "larga", que habitualmente se inicia en la niñez.
Precisamente, el objetivo es que la asociación pueda prestar especial atención a los niños y niñas que padecen escoliosis y a sus familiares porque, en muchos casos, se sienten "perdidos" y además, en ocasiones, los niños también se ven afectados por problemas psicológicos.
"El apoyo emocional a estos niños y adolescentes que sienten vergüenza al verse distintos a los demás es esencial. La ayuda de los psicólogos infantiles, junto con los traumatólogos especialistas en espalda, médicos rehabilitadores y fisioterapeutas llevará a buen término una enfermedad larga y difícil. De este modo evitaremos que estos niños a la larga sean personas dependientes y que realicen una vida normal", han destacado.
Por ello, creen que sería positivo crear una asociación sin ánimo de lucro que sirva de apoyo y de punto de encuentro para los afectados por la escoliosis y también para conocer, de la mano de expertos, pautas que les puedan servir a sobrellevar mejor su enfermedad. "Creemos que puede tener un interés social y humanitario prioritario", han apuntado.
Las mismas fuentes han indicado que han trasladado la idea a médicos y expertos tanto de Osakidetza como del Igualatorio Médico Quirúrgico, que han considerado que puede ser una iniciativa positiva para las personas afectadas por esta dolencia.
Por ello, a través de la dirección 'escoliosiseusk@movistar.es', se está empezando a trabajar para iniciar la "captación" de enfermos y familiares que puedan estar interesados en la iniciativa para poder hacer realidad la puesta en marcha de la asociación.
Precisamente, el médico Eduardo Álvarez Irusteta, integrante de la Unidad de Columna del Hospital de Basurto, ha destacado, en declaraciones a Europa Press, que "obviamente" sería positivo que los enfermos de escoliosis en el País Vasco se constituyeran en asociación si el objetivo de la misma es la "información seria", la lucha por evitar el fraude en los tratamientos y el apoyo entre los propios afectados.
A su juicio, la buena comunicación entre los profesionales que tratan esta enfermedad, las autoridades y los maestros y profesores puede ser "beneficioso" y una asociación "un buen catalizador".
Por ello, ha destacado que, "como parte interesada" en el buen resultado del tratamiento de estos pacientes, anima a los afectados a que impulsen esta asociación.
DIFERENTES TIPOLOGÍAS
En relación a la propia enfermedad, Álvarez Irusteta ha explicado que la escoliosis es una curvatura tridimensional de la columna y hay diferentes tipologías como la congénita, paralítica, yatrogena, postraumática, la escoliosis asociada a otras enfermedades, la de adulto y la idiopática, que es la "más frecuente".
La escoliosis idiopática se denomina así porque se desconoce su causa principal, aunque existe una mayor incidencia en miembros de la misma familia.
Según las estimaciones del experto, alrededor de un 35 por ciento de los niños vascos precisan ser valorados por un especialista por presentar una escoliosis.
La escoliosis y, en concreto, la idiopática, es más frecuente en la adolescencia, en una relación cuatro a uno y, sobre todo, se da en el sexo femenino. La edad más frecuente de aparición desde el punto de vista estadístico es a los 12 años, en el caso de las niñas.
Álvarez Irusteta ha señalado que no se ha constatado un incremento de la enfermedad con los años, sino que, de hecho, las escoliosis paralíticas han disminuido con la vacunación de la polio y el "mejor conocimiento" de la enfermedad.
Además, ha aumentado el diagnóstico "temprano", lo que, según el médico es "muy positivo", ya que es diferente tratar un paciente con una deformidad de 20º que tratarlo cuando la deformidad ha progresado y presenta 60º. En este sentido, ha destacado la importancia que tiene para el diagnóstico precoz las exploraciones del pediatra, las campañas escolares y los medios diagnósticos.
En relación a los tratamientos, en el caso de la escoliosis idiopática, Álvarez Irusteta ha indicado que existen tratamientos que ayudan "poco" en la evolución de la enfermedad, pero mejoran la elasticidad del paciente y los cuadros de dolor, aunque no cambie la progresión de la deformidad.
En este sentido, el doctor ha señalado, por tanto, que se ha demostrado que los ejercicios, la natación, la estimulación eléctrica, las manipulaciones vertebrales no mejoran y no impiden la deformidad si ésta fuese a progresar.
Álvarez Irusteta ha añadido que, a partir de los 20º, cuando hay todavía probabilidad de crecer, se utilizan diversos corsés que se han mostrado efectivos, para la "no progresión" de la deformidad. No obstante, ha apuntado que los corsés también pueden tener sus "desventajas" y deben ser "indicados y supervisados".
Según ha explicado, en "pocos casos" el corsé indicado no funciona y se da un aumento de la deformidad. Álvarez Irusteta ha indicado que es, en esos casos, cuando el paciente presenta curvas superiores a 40-45º, en el momento en que se aconseja la cirugía.
Álvarez Irusteta ha destacado que la cirugía ha avanzado "mucho" y los medios para corregir la escoliosis son "más precisos", de manera que se consiguen "buenas correcciones". "Pero estamos hablando de cirugía mayor con mayúsculas, en la que puede haber problemas serios", ha apuntado.
En todo caso, ha precisado que las complicaciones "no son mayores" estadísticamente que en otras intervenciones y que, para los casos en los que está indicada una intervención, si no se realiza, los riesgos de progresión de la enfermedad son "muchos" y ello conllevaría una "muy mala calidad de vida" del paciente en edad adulta.
El experto ha destacado que, en la actualidad, se está operando a casi tantos niños como adultos y los pacientes operados pueden hacer una vida "normal", salvo deportes extremos o grandes esfuerzos.