BILBAO 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
El parlamentario de Ezker Batua, Mikel Arana, ha presentado una proposición no de ley en la que insta al Departamento vasco de Sanidad a realizar "una campaña informativa" para dar a conocer a los profesionales sanitarios la instrucción sobre el procedimiento de comunicación de las enfermedades que pueden ser calificadas como profesionales "o cuyo origen profesional se sospecha".
En la iniciativa, Arana precisa que, según estudios especializados de la OIT y de la Agencia Europea de Seguridad y Salud, radicada en Bilbao, "el cáncer profesional, derivado de la exposición a sustancias cancerígenas durante el desarrollo del trabajo, es la principal causa de muerte laboral".
Además, recuerda que el decreto 299/2006 del Ministerio de Trabajo que aprueba el cuadro de enfermedades profesionales señala, en su artículo 5, que "cuando los facultativos del Sistema Nacional de Salud tuvieran conocimiento, en el ejercicio de su actividad, de una enfermedad profesional o cuyo origen profesional se sospecha, lo comunicarán a los oportunos efectos a la entidad gestora y, en su caso, a la entidad colaboradora de la Seguridad Social que asuma la protección de las contingencias profesionales".
También alude a la existencia de una Instrucción, la número 1 de 26 de diciembre de 2007 del viceconsejero de Sanidad, del director de Osalan y de la directora general de Osakidetza sobre "el procedimiento de comunicación de las enfermedades que podrían ser calificadas como profesionales o cuyo origen profesional se sospecha".
"ABSOLUTO FRACASO"
El parlamentario de Ezker Batua asegura que esta Instrucción ha resultado "un absoluto fracaso", dada la "ridícula" cifra de sospechas de enfermedad laboral comunicadas. "Tan sólo 41 el año pasado, mientras que CC.OO. ha logrado reconocer el triple de casos que Osakidetza", indica.
A su juicio, estas cifras evidencian que "la mayoría de los médicos de Osakidetza desconocen la Instrucción" y que la dirección "no ha realizado ninguna campaña informativa y formativa para que los profesionales sanitarios pregunten al enfermo sobre su trabajo y comuniquen las sospechas de enfermedad profesional al Instituto Nacional de la Seguridad Social, con el objetivo de evitar que los afectados pierdan las pensiones que les corresponden".
Por ello, plantea que el Departamento dirigido por Rafael Bengoa desarrolle una campaña informativa en este sentido y que traslade a la mutua correspondiente el coste de la atención concedida a los pacientes con enfermedades profesionales declaradas, "como sucede con los ingresos por accidente de trabajo".
Asimismo, propone que el Ejecutivo vasco dote de más recursos especializados a la Unidad de Salud Laboral de Osalan para detectar "la ocultación de enfermedades profesionales por parte de los Servicios de Prevención Ajenos durante la realización de los reconocimientos médicos".