MADRID/SAN SEBASTIÁN, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un proyecto de nutrición implantado en un colegio guipuzcoano ha logrado que los alumnos tomen más leche y verduras y menos carne y embutidos. La iniciativa, puesta en marcha por la doctora Esther Tellería, contó con la participación de padres, profesores y personal de comedor y cocina para impulsar hábitos alimentarios saludables en los chavales.
Tellería indicó a Europa Press TV que los resultados obtenidos por este método ponen de manifiesto la mejoría de la alimentación en escolares producida por "la ingesta de productos como la leche, el pan, las verduras u otros alimentos base para una correcta dieta".
"Con una estrategia definida, con una voluntad decidida del centro por abordar el problema y con una colaboración mínima por parte de los padres, se han conseguido resultados muy esperanzadores con los alumnos", explicó.
Según las conclusiones de este proyecto, denominado 'Ondo Jan Ondo Bizi' que se lleva adelante en el centro público Orokieta Herri Eskola, en Zarautz, Guipúzcoa, el 49 por ciento del alumnado ha alcanzado un consumo diario normal de leche y ha descendido a un 19 por ciento el consumo de lácteos hiperazucarados.
También ha bajado al 28 por ciento el consumo excesivo de carnes y productos cárnicos y aumentado a un 84 por ciento el de pescado.
Según el estudio, al que tuvo acceso Europa Press, además ha mejorado la ingesta de verdura cocida aunque todavía más de la mitad de los alumnos presentan una ingesta insuficiente. Con respecto a la fruta se ha conseguido que el 36 por ciento de los chavales alcance un consumo normal de estos alimentos aunque más de la mitad no come las tres piezas diarias recomendables.
Tanto en el caso de la pasta como en el del arroz ha bajado el consumo excesivo (17%) y ha aumentado la normalidad de su ingesta (85%) a favor del aumento de consumo de verduras. El chocolate y las chucherías es el segmento en el que ha costado cambiar los hábitos alimentarios de los chavales ya que su consumo excesivo apenas se ha podido reducir entre un 5 y un 9 por ciento, respectivamente.
Según el informe, en el apartado de los embutidos es donde más éxito ha demostrado este programa ya que del 70 por ciento del alumnado que consumía en forma excesiva estos productos se ha pasado al 46 por ciento tras la aplicación del proyecto. No ha sido el caso de la bollería, cuyo consumo excesivo sólo se ha logrado bajar en un 10 por ciento.
Este programa surgió de la convicción de padres, profesores y personal de comedor y cocina de este colegio que, con la ayuda de Tellería, directora de varios proyectos de nutrición en colegios guipuzcoanos, tratan de mejorar los hábitos alimentarios de los alumnos y evitar así las enfermedades derivadas de una mala alimentación.
