BARCELONA 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
Una intervención protocolizada desde la Atención Primaria incrementa en un 50 por ciento las posibilidades de dejar de fumar a largo plazo, según señala un estudio del Instituto Universitario de Investigación en Atención Primaria Idiap Jordi Gol en Barcelona.
En un comunicado, el instituto ha indicado que el 75 por ciento de las personas incluidas en el estudio no se planteaban en un futuro próximo dejar el tabaco, mientras que la intervención del médico de familia y la enfermera ha ayudado por igual a los que querían dejarlo enseguida como a los que no se lo planteaban.
El estudio se basa en diferenciar a las personas que quieren dejar de fumar en un futuro próximo de las que no, y aplica intervenciones diferentes: la persona que no se lo ha planteado debe reconsiderar el papel que juega el tabaco en su vida, así como los pros y los contras para dejar este hábito, encontrando sus propios motivos.
Por otro lado, las personas que ya quieren dejarlo, necesitan estrategias concretas y en algunos casos un fármaco y, aunque la intervención varía, los resultados finales son similares en ambos casos.
Así, la atención primaria puede jugar un papel clave en estas etapas, ya que en su vida las personas consultarán por varios motivos en el centro de atención primaria, algunos de ellos relacionados con el consumo de tabaco, aunque la mayoría no.
A pesar de que la gran mayoría de personas sabe que el consumo de tabaco es perjudicial, una tercera parte de la población adulta fuma, y muchas veces la gente se plantea dejarlo cuando ya tiene un problema de salud grave.
El perfil de las personas que han participado en el estudio es muy similar al del fumador habitual en España: una edad media de 43 años, inicio del hábito a los 16 y llevar 26 años fumando alrededor de 20 cigarrillos diarios.
De éstos, la mitad son mujeres de clase social media y baja y son mayoritariamente sedentarios, que además en un 44 por ciento declaran tener problemas de salud relacionados con el tabaco.
El estudio ha preguntado a más de 2.800 fumadores, la mayoría de los cuales no consultaban para dejar de fumar, y para ello se han implicado 82 centros, 172 profesionales y 13 comunidades autónomas, con un periodo de seguimiento de dos años.