MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
Durante las procesiones de Semana Santa los costaleros tienen que cargar un gran peso y, por ello, es importante que se extremen las precauciones, para así evitar sufrir lesiones, además de prepararse con tiempo suficiente, ya que estos son "atletas eventuales" y, por este motivo, la "prevención es clave", según ha destacado el secretario general del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM), José Santos.
En esta línea, entre un 10 y un 15 por ciento de los costaleros suele sufrir lesiones, ya que "la espalda se ve muy aquejada, puesto que se hace una carga asimétrica del tronco, se lleva el peso sobre un lado, con lo que la musculatura está en máxima tensión para mantenerlo", ha explicado el jefe del Servicio de Traumatología del Hospital Quirónsalud Málaga, Rafael López Arévalo.
"En cuanto al hombro, la carga es excéntrica y directa sobre la clavícula y la articulación que forma esta con la escápula, lo que conlleva a un peso brutal sobre esta zona del hombro, produciendo edema e inflamación en la articulación y contractura defensiva del trapecio y de los músculos escapulares", ha añadido.
Por ello, Santos ha aconsejado, una vez iniciada la marcha, mantener la cabeza erguida y la mirada al frente para evitar lesiones en el cuello, contraer la musculatura abdominal y lumbar, así como mantener una postura correcta, con el tronco erguido y la espalda recta.
"Se debe pisar con toda la planta del pie, no flexionar del todo las articulaciones del codo y la muñeca, beber líquidos de forma continuada, calentar antes y realizar estiramientos después de salir a la procesión, y adoptar medidas protectoras como el uso de fajas o vendajes, sobre las partes del cuerpo más susceptibles de sufrir lesiones", ha señalado.
Una vez finalizada la procesión, al igual que cuando se realiza cualquier tipo de deporte, el secretario ha recomendado "parar lentamente, seguir moviéndose para enfriar el cuerpo con lentitud, estirar, y tratar las posibles molestias lo antes posible para que no vayan a más".
Los espectadores también deben extremar las precauciones ya que acostumbran a hacer largas caminatas, aguantar de pie prolongados periodos de espera y, con frecuencia, con calzado inapropiado, y en este sentido, se deben tener en cuenta similares precauciones que los hombres de trono y los nazarenos, según el jefe del Servicio de Fisioterapia y Rehabilitación del Hospital Quirónsalud Marbella, Marcos González.