La supervivencia de un paciente con una donación de un vivo es superior que con la de un donante muerto
MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Nefrología (SEN), la Sociedad Española de Enfermería Nefrológica (SEDEN), la Federación Nacional de Asociaciones para la Lucha Contra las Enfermedades del Riñón (ALCER) y la Sociedad Española del Trasplante (SET), con la colaboración de Novartis, han presentado la campaña 'Donar es recibir', con la que pretenden aumentar el número de donantes vivos de riñón y que, actualmente, se sitúa en torno al 12 por ciento de toda la actividad de trasplante renal.
A pesar de que España es el país líder a nivel mundial en el número de trasplantes, los expertos han recordado que estas cifras proceden de donantes que han muerto y no tanto de los que están vivos. Por ello, y como consecuencia de la disminución de los accidentes de tráfico que han provocado que la mayoría los donantes sean personas mayores que han fallecido por un accidente cerebrovascular, y no de jóvenes que han perdido repentinamente su vida en la carretera, los expertos han destacado la importancia de que se aumente el número de donaciones vivas para bajar así las listas de espera.
Y es que, en España unas 2.000 personas están anualmente a la espera de recibir un trasplante renal --se realizan al año unos 2.000 trasplantes de 4.000 pacientes que lo necesitan--, por lo que es necesario incrementar este tipo de donaciones y alcanzar así el porcentaje de otros países del norte de Europa o Estados Unidos donde ronda el 50 por ciento de los trasplantes renales totales.
"Afortunadamente el donante joven va desapareciendo paulativamente haciendo que aparezca la figura de una persona mayor que ha muerto por un accidente cardiovascular y que, por su edad, sus órganos tienen ya una cierto grado de arterioesclerosis. Por tanto, el donante ha cambiado. Y sin que tengamos un problema cuantitativo exagerado, los jóvenes que están en diálisis --menores de 40 o 50 años-- no tienen una facilidad de emparejamiento aceptable y eso hace que necesitemos donantes para un número de pacientes más jóvenes y que necesitan un tipo de donante diferente de los que se están obtenido en la actualidad", ha explicado el presidente de la SET, Manuel Arias.
2.000 PERSONAS EN LISTA DE ESPERA
Además, según ha asegurado el representante de la SEN, Ignacio Revuelta, los pacientes que reciben estas donaciones de una persona viva tienen una supervivencia "más elevada" que aquellos que lo han recibido por parte de un muerto. Esto se debe a que los donantes vivos tienen unos tratamientos preventivos que consiguen mejorar el estado del riñón que va a ser donado, aspecto distinto que en el de los cadáveres cuya donación se tiene que hacer de manera inmediata.
"España es líder mundial en donación de cadáver, pero un buen sistema de trasplantes debe desarrollar también la opción de donación en vida", ha comentado el presidente de ALCER, Alejandro Toledo, tras matizar que el punto de partida es "mejor que el de Estados Unidos y los países del norte de Europa porque a pesar de estar por debajo de ellos en donación de vivo, la tasa de donación de cadáver en España permite proporcionar órganos para todas las patologías humanas y además, la donación en vida --que sólo es posible en riñón y algo en hígado-- está subiendo", ya que se ha registrado un incremento de un 30 por ciento entre el año 2010 y el 2011.
Asimismo, la doctora de la Unidad de Trasplantes de Novartis, Nuria Saval, ha asegurado que el trasplante de donante vivo puede ser una modalidad que "ahorra" un tratamiento de diálisis y, por tanto, mejora la calidad de vida del trasplantado. "Con esta campaña queremos transmitir la sensación de que no sólo se beneficia el donante y el trasplantado si no que también todo el entorno familiar", ha recalcado Saval.
SE PUEDE "AHORRAR" LOS TRATAMIENTOS DE DIÁLISIS
En concreto, la donación de vivo da mayores posibilidades de que el paciente pueda evitar iniciar la diálisis y, por ello, llegar más rápidamente y en mejores condiciones al trasplante. Además, el beneficio no es sólo para el receptor sino para todos los pacientes subsidiarios de un trasplante renal al no competir por los órganos de los donantes fallecidos.
"Incrementar estas donaciones es muy importante, en especial para algunos colectivos de pacientes, como los enfermos jóvenes y los niños con enfermedad renal, cuya probabilidad de optar a órganos de pacientes es muy baja debido a la edad de esos donantes. Se da la circunstancia, además, que los niños son quienes más rápidamente precisan un riñón para poder desarrollarse y crecer de forma adecuada, por lo que la donación en vida aporta en estos casos un valor añadido y la posibilidad de desarrollarse como cualquier persona", ha recalcado el presidente de ALCER.
Ahora bien, según ha recordado la representante de la SEDEN, Maribel Delgado, no todas las personas pueden ser donantes en vida ya que está prohibido este acto a los menores de edad, a aquellos que tienen un problema renal o cardiovascular, elevado peso o, incluso, que sean pacientes con alguna deficiencia física o mental que impida dar el consentimiento libremente.
Por último, el presidente de ALCER ha avisado de que la "asignatura pendiente" que tiene España en estos momentos es la "prevención" ya que, según ha asegurado, si se realizan unos buenos tratamientos preventivos se consigue "ralentizar" el desarrollo de la enfermedad. "Muchos pacientes evitarían pasar por diálisis si de alguna manera hubieran tenido una información en un estadío temprano que pudieran optar por ese tratamiento", ha matizado para zanjar asegurando que la ambición es conseguir "60 donantes por millón".