MADRID 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
La primera edición del 'Manual del Residente en Geriatría' se ha presentado este viernes en el marco del 54 Congreso de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) y 24 Congreso da Sociedade Galega de Xerontología y Xeriatría. Se trata del primer manual en el que han participado todas las unidades docentes de Geriatría de España y que está escrito íntegramente por residentes con la supervisión de los tutores de dichas unidades docentes.
Además, el texto ha contado con la colaboración de GlaxoSmithKline (GSK) y Amgen, como muestra del compromiso de ambas compañías con la especialidad de Geriatría y con la formación de los médicos residentes.
Según ha explicado el presidente de la SEGG, jefe de servicio de Geriatría del Hospital Clínico San Carlos y coordinador de la obra, Pedro Gil, con este manual se han cubierto las "diferentes" demandas formativas realizadas por los propios internos residentes y se ha puesto de manifiesto el carácter "trasversal" de la especialidad.
"A diferencia de otros manuales en Geriatría, se inicia con tres bloques principales: la valoración geriátrica integral (VGI), un bloque en el que se revisan los niveles asistenciales en geriatría en función de su eficacia y eficiencia, y otro importante bloque sobre los grandes síndromes geriátricos como depresión, síndrome confusional agudo y trastornos del sueño, entre otros", ha comentado Gil.
A continuación, ha proseguido, se realiza una actualización en la prevención y tratamiento de las múltiples enfermedades que afectan al anciano como la osteoporosis o la hiperplasia benigna de próstata, patologías en las que investigaciones recientes pueden marcar un cambio en el abordaje terapéutico del paciente.
LA VGI ES LA PRINCIPAL HERRAMIENTA DE DIAGNÓSTICO GLOBAL
Dicho esto, Gil ha recordado que la VGI constituye la herramienta principal de diagnóstico global que se debe aplicar a todos los pacientes geriátricos en todos los niveles asistenciales. "Si la VGI es la técnica diagnóstica específica, los niveles asistenciales son el instrumento terapéutico y por ello se dedica un capítulo al análisis de las diferentes intervenciones geriátricas especializadas en función del nivel de evidencia clínica existente", ha recalcado.
Asimismo, los síndromes geriátricos son formas frecuentes de presentación de la enfermedad en la edad avanzada. Se trata de situaciones con alta prevalencia e incidencia en la población mayor, que se asocian con frecuencia a un deterioro funcional y cognitivo que lleva a la discapacidad del paciente y a una pérdida de calidad de vida, de modo que, por su importancia, una buena parte de la obra se dedica a la definición y manejo de estos síndromes geriátricos.
De manera general, como novedades en la especialidad, Gil ha destacado la puesta en marcha de unidades compartidas por traumatólogos y geriatras para la atención de los pacientes con fractura de cadera, que consiguen una reducción de las estancias hospitalarias, y la cada vez más desarrollada asistencia al final de la vida de los pacientes con enfermedades crónicas progresivas.
"Si se cumple el objetivo de acompañar a muchos médicos en su camino formativo con el que nace esta obra, será un éxito para ellos mismos como autores y, sobre todo, para los propios ancianos como beneficiarios", ha concluido.