MADRID, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
La prescripción de un medicamento en formato monodosis, para que el paciente adquiera el número exacto de pastillas que necesita para su tratamiento en lugar del tradicional envase, ayuda a que los ciudadanos no acumulen fármacos sobrantes en sus casas y, además, permite al Sistema Nacional de Salud (SNS) reducir su gasto farmacéutico por cada molécula en torno a un 24 por ciento.
"De cualquier producto que puedas acabar sustituyendo por este formato, se logra este ahorro aproximado", según ha asegurado el director de la Unidad de Consultoria del Consorci Sanitari i d'Atencio Social de Cataluña, José Luis Segú, durante una acto organizado por la farmacéutica Onedose Pharma para presentar la llegada a las farmacias españolas de sus seis primeros fármacos en este formato, tras haber visto bueno del Ministerio de Sanidad.
En concreto, están disponibles en formato monodosis dos protectores de estómago (omeprazol de 20 miligramos y pantoprazol de 40 miligramos), un antibiótico (levofloxacino, en dosis de 500 miligramos), un analgésico (paracetamol de un gramo), un antiinflamatorio (ibuprofeno de 600 miligramos) y un antidepresivo (venlafaxina, en dosis de 75 y 150 miligramos). Además, a primeros de año lanzarán tres nuevos antibióticos.
Para comprobar el ahorro económico y la racionalización del consumo que estos nuevos formatos pueden lograr, Segú puso en marcha un estudio en dos centros de salud de Barcelona y, tras cuatro meses, se vio que el sistema sanitario podría ahorrarse unos 3,1 euros por paciente y año de media, mientras que los ciudadanos acumularían una media de 19 pastillas menos en sus domicilios.
"Sitúa el stock de medicamentos donde tiene que estar, que es en la oficina de farmacia y no en el botiquín del paciente", ha reconocido Segú.
MEJOR QUE LA ADECUACIÓN DE ENVASES A TRATAMIENTOS
Este formato monodosis está pensado para los tratamientos agudos y, según asegura, es más eficaz para no despilfarrar fármacos que la adecuación de los envases a la duración de los tratamientos, también impulsada por el Ministerio de Sanidad. "El problema de esta medida es que esto suele ser más difícil porque un mismo medicamento suele tener varias indicaciones, y en función de cada una se necesitan más o menos pastillas", ha apuntado.
Además, sostiene que junto al ahorro que representa, en función del medicamento su fabricación puede ser también más barata.
Tras la salida al mercado de estos primeros medicamentos monodosis, la directora general de Onedose Pharma, Rosa Pardina, ha explicado que el siguiente paso es informar a médicos y farmacéuticos de su existencia, a unos para poder comenzar a recetarlos y a los otros para incluirlos en sus establecimientos.
"Contribuimos al uso racional del medicamento y a reducir el gasto sin hacer sacrificios. De hecho, el ahorro viene derivado de las dosis innecesarias que al final se acaban destruyendo", ha defendido.
Además, Pardina ha explicado que estos medicamentos en dosis individual incorporan en su envase toda la información que el paciente necesita, son fáciles de abrir y utilizan un sistema de colores para ayudar a los polimedicados.