MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los profesionales de la Podología manifiestan su descontento y reclaman a las administraciones públicas su inclusión en el Sistema de Salud Público, pues más del 70 por ciento de los problemas en los pies, sobre todo en personas diabéticas, podrían resolverse con profesionales de la Podología en Atención Primaria (AP), sin llegar a los hospitales.
En concreto, según declaran desde el Colegio Oficial de Podología de la Comunidad de Madrid (COPOMA), a consecuencia del confinamiento y de la limitación en la movilidad, en las consultas de Podología se están atendiendo actualmente multitud de patologías en personas diabéticas, como uñas encarnadas, úlceras en el pie o helomas infectados, por desatención previa que, si no se tratan de manera precoz, pueden llegar a ocasionar graves problemas de salud.
Tal y como reflejan los últimos datos del Consejo de Colegios de Podólogos, el 20 por ciento de los diabéticos que ingresan en el hospital lo hace por problemas en los pies. A su vez, hasta un 34 por ciento de las personas diabéticas pueden desarrollar úlceras en el pie derivadas de la neuropatía periférica.
Así, teniendo en cuenta que en un paciente diabético una úlcera o infección de los pies tiene el riesgo de evolucionar hacia una amputación, incluso hasta de la pierna, es un hecho que 5 de cada 6 amputaciones no traumáticas que se practican en pies son en pacientes diabéticos. De este modo, el riesgo de amputación por pie diabético en España es de 52 por 100.000 habitantes, muy por encima de la tasa de muchos otros países europeos.
A los perjuicios personales en los que puede desembocar esta desatención y al aumento de la morbilidad y mortalidad en estos pacientes, además, debemos sumar el incremento del gasto sanitario por soluciones más drásticas.
Por ello, desde el COPOMA afirman que, sin ninguna duda, esta presencia aportaría "unos beneficios muy significativos al sobrecargado sistema sanitario". Por un lado, se mejoraría la calidad de vida de algunos grupos poblacionales, como diabéticos, así como el control de dicha enfermedad; por otro, se disminuiría la morbi/mortalidad relacionada con las complicaciones podológicas.
Además, la presencia de estos profesionales podría reducir la lista de espera de ciertas especialidades, pues, potenciando la atención primaria, se prevendrían multitud de problemáticas de salud más graves, con el consiguiente ahorro en cuanto al gasto para el sistema sanitario.
Así, según estos profesionales, su inclusión en AP llevaría a datos de mejora significativa en cuanto a prevención de ciertas patologías, reducción de las complicaciones derivadas de los problemas de los pies y "un ahorro sustancial" en el gasto sanitario.