MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un Plan de Inversión en Sanidad que durante el próximo lustro (2021-2025) elevase de manera estable los recursos destinados a la asistencia sanitaria en dos puntos en relación al PIB podría generar un incremento de hasta 427.000 millones de euros en el PIB entre 2025 y 2040, según el informe 'Inversión en sanidad: la vía española hacia la prosperidad', elaborado por Analistas Financieros Internacionales (Afi) con el apoyo de la Fundación Farmaindustria.
Así, calculan que ña priorización en la inversión en capital humano, mejorando la calidad y cantidad del factor trabajo, así como la implementación de reformas estructurales con el objetivo de reforzar la prevención, la eficiencia y los mecanismos de generación y difusión de conocimiento en materia de salud, tendrían un efecto positivo sobre el aumento la tasa crecimiento del PIB de 0,25 puntos porcentuales a lo largo del período comprendido entre 2025 y 2040.
Este impacto económico se materializaría a través de tres mecanismos: la ampliación de la fuerza laboral con programas de prevención y con la inversión necesaria en investigación de nuevos tratamientos; una mejora del estado de salud de los trabajadores para aumentar su productividad; y una mejora del estado de salud que permitiera alargar la vida laboral de muchos trabajadores. Teniendo en cuenta estos tres canales, el PIB podría ser un 4 por ciento más alto en 2040, estiman.
"España lleva bastantes años invirtiendo en sanidad menos que los países de su entorno y esta situación hay que revertirla si queremos estar preparados para futuras emergencias sanitarias, pero también para afrontar el gran reto que suponen el envejecimiento y la cronicidad y la incorporación de los avances tecnológicos. Para hacerlo, y hacerlo bien, tenemos que ver esta apuesta como lo que es, una inversión, como constata este informe, y no como un gasto. Debemos dejar de hablar de problema, que es lo que subyace a menudo al referirnos a la sanidad y los medicamentos, y hablar de solución, de oportunidad", ha destacado el director general de Farmaindustria, Humberto Arnés.
El informe, presentado este lunes en un encuentro en Madrid y retransmitido vía telemática, desarrolla un análisis prospectivo que parte de dos escenarios: uno inercial, en el que no se toman decisiones estratégicas sobre el uso de recursos públicos, y otro alternativo, en el que se prioriza la inversión en el sistema sanitario con un Plan de Inversión en Sanidad que, entre 2021 y 2025, elevase de manera estable los recursos destinados a la asistencia sanitaria en dos puntos en relación al PIB.
Con el objetivo de articular dichas inversiones, el informe detalla una serie de medidas concretas orientadas a mejorar la eficiencia y coordinación dentro del Sistema Nacional de Salud, potenciando sus capacidades de generación de conocimiento y actividad industrial y contribuyendo a reforzar tres áreas prioritarias como son la atención primaria, la salud pública y la inversión en capital humano y tecnológico.
Diego Vizcaíno, socio director del área de Economía Aplicada de Afi, ha indicado que, "con datos de 2018, el sector sanitario generó un valor añadido de alrededor de 94.600 millones de euros, equivalente al 8,7 por ciento del PIB". Además, ha valorado cómo el sector farmacéutico español "está plenamente integrado en las cadenas de valor globales y muestra elevados niveles de competitividad exterior". "Actualmente, España es el 12 exportador mundial de productos farmacéuticos, con una cuota de mercado del 2,1 por ciento", ha añadido.
Así, por cada euro invertido en investigación sanitaria (pública o privada), la economía genera 1,6 euros de valor añadido de manera directa, indirecta e inducida. Además, cada millón de euros invertido en este sector contribuye a la generación y mantenimiento de más de 15,6 empleos.