MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las personas que roncan presentan mayores problemas cardiovasculares, según un estudio realizado por el área de Cardiología Preventiva en el Centro Cardiovascular del Sistema de Salud de la Universidad de Michigan (EE.UU.) y publicado en la edición de de febrero de la revista 'Journal of the American College of Cardiology'.
Así, la investigación demostró que cuando se trató a los pacientes con apnea obstructiva del sueño el riesgo de enfermedad cardiovascular bajo "enormemente", según explica el director de Cardiología Preventiva, el doctor Melvyn Rubenfire, para quien aún "es demasiado temprano para decir si el ronquido es un factor de riesgo independiente para la enfermedad cardiaca".
La apnea obstructiva produce una obstrucción de la parte posterior de la garganta, que produce que se deje de respirar durante la noche. Cuando deja de respirar, los niveles de oxígeno bajan drásticamente y aumentan las hormonas y la adrenalina. Esas hormonas contribuyen a la alta presión sanguínea, irregularidades en el ritmo cardiaco, lo cual aumenta el peligro de falla cardiaca e infartos.
No siempre las personas que roncan sufren, necesariamente, la apnea obstructiva del seño, aunque "la vinculación es muy fuerte". Por este motivo, advierte de que, todo aquel que ronque fuerte, que se despierte sintiendo que no ha descansado lo suficiente, que tenga hipertensión, diabetes o exceso de peso, tiene propensión a sufrir trastornos de respiración durante el sueño o la apnea obstructiva del sueño.
Por otra parte, se observó que la relación entre el ronquido y los problemas cardiovasculares van para los dos lados. Es decir que las personas con problemas cardiacos tienen más probabilidades de padecer trastornos del sueño. "De esta manera la falla cardiaca puede ser una de las causas de la apnea obstructiva del sueño, y la apnea obstructiva del sueño puede empeorar gravemente la función cardiaca", dijo Rubenfire.