MADRID, 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un estudio genético dirigido por la empresa islandesa Decode Genetics ha mostrado que la paternidad tardía puede afectar negativamente a los hijos, que tienen más riesgo de presentar mutaciones genéticas, según informa la revista 'Nature'.
La investigación ha sido dirigida por el doctor Kari Stefansson, que estudió la secuencia de ADN de 78 padres e hijos y descubrió una correlación directa entre la edad del padre y el número de mutaciones o pequeñas alteraciones del ADN de sus hijos.
En concreto, los resultados indicaron que un padre de 20 años transmite una media de 20 mutaciones, mientras que un padre de 40 años unas 65, aproximadamente unas dos mutaciones por cada año que el hombre retrasa su paternidad.
Además, han descubierto que el 97 por ciento de todas las mutaciones de los niños provienen de sus padres y no de sus madres.
Aún se desconoce el impacto exacto que esto tiene en la salud del niño. Sin embargo, los datos han servido para respaldar estudios previos que aseguraban que los padres son responsables de las mutaciones, y no las madres, y que el número de alteraciones aumentaba con la edad del progenitor.
De igual modo, también respalda las teorías que apuntaban que una paternidad tardía podía relacionarse con un mayor riesgo de problemas mentales en el menor.
"La edad media de la paternidad ha venido aumentando desde 1970 en los países industrializados y, durante el mismo período, también ha habido un incremento del autismo, y es muy probable que parte de dicho aumento se deba a la edad cada vez mayor de los padres", ha explicado a la BBC el autor del estudio.
Los hallazgos, sin embargo, no deben alarmar a los padres mayores, según ha admitido este experto, ya que la prevalencia de muchos de estos desórdenes en la población es muy pequeña, lo que significa que aunque se esté duplicando el riesgo al tener un hijo a edades avanzadas, la probabilidad de que esto ocurra sigue siendo mínima.
De hecho, recuerda que en la actualidad casi todos los niños nacidos de padres mayores están sanos.
EL AUMENTO DE MUTACIONES REPERCUTE AL CEREBRO
Además, los autores del estudio han destacado que este aumento de las alteraciones genéticas está relacionadas con condiciones neurológicas porque el cerebro depende de más genes para su desarrollo y regulación.
Esto quiere decir que es muy probable que las mutaciones de genes deriven en problemas en el cerebro, más que en ningún otro órgano, a pesar de que aún no está claro si la edad de los padres tiene un efecto en algún otro órgano o sistema, ya que dicha investigación aún no se ha llevado a cabo.
La razón por la que los hombres transmiten el grado de mutación es que las mujeres nacen con todos sus óvulos, mientras que el hombre produce esperma nuevo durante toda su vida adulta y es durante esa producción donde los errores genéticos se crean, sobre todo cuando los hombres envejecen.
En un comentario también publicado por la revista 'Nature', el profesor Alexey Kondrashov de la Universidad de Michigan (Estados Unidos) señaló que los hombres jóvenes deben considerar congelar su esperma si estudios futuros mostrasen que verdaderamente existen efectos negativos en la salud de los niños.
El doctor Stefansson, sin embargo, dijo a la BBC que desde una perspectiva a largo plazo, la decisión de algunos hombres de retrasar su paternidad puede estar acelerando la evolución de nuestra especie. No obstante, advierte de que "lo que es malo para una generación, podría ser bueno para nuestras especies en general".