MADRID 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los pacientes obesos que se operan viven 15 años más que los que no lo hacen, tal y como aseguran los expertos que van a participar este jueves y viernes en Madrid en el I Congreso Médico-Quirúrgico de la Obesidad que organizan conjuntamente la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) y la Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad Mórbida y Enfermedades Metabólicas (SECO).
En esta cita, en la que se van a reunir medio millar de cirujanos y endocrinos, los expertos van a debatir acerca de las últimas novedades en el manejo y control de la obesidad. En ella se va a recordar el hecho de que "en España se realizan unas 6.000 cirugías de obesidad al año", dato que podría aumentar, ya que "cerca de dos millones de personas podrían ser candidatos a beneficiarse de esta intervención para perder peso".
Actualmente, el Estado consume "muchos recursos" en el abordaje de esta patología, concretamente el siete por ciento del PIB, señalan. Gran parte este gasto se produce "por la medicación necesaria para tratar las complicaciones asociadas, como la diabetes, el colesterol o la hipertensión", indican.
Por todo ello, los especialistas piden a todos los agentes implicados "que sean conscientes de que la cirugía es una intervención que necesitan muchos pacientes". Para ellos, esta intervención "en ningún caso responde a una cuestión estética".
En concreto, exponen que la cirugía de la obesidad está indicada "en pacientes con obesidad mórbida que han fracasado con el tratamiento médico o en aquellos con un índice de masa corporal superior a 35 y que tienen alguna enfermedad grave asociada". Sumadas las personas con ambas características se observa que éstas suponen "entre el ocho y el diez por ciento" de la población española, afirman.
MENOS DEL 1% DE LOS PACIENTES ACCEDEN A LA CIRUGÍA BARIÁTRICA
A juicio del miembro del Comité Organizador de esta reunión y representante de SEEDO, el doctor Miguel Ángel Rubio, "menos del uno por ciento de los pacientes que se podrían beneficiar de la cirugía bariátrica optan a ella", a pesar de que es una intervención que "ha mostrado ser costo-efectiva a largo plazo".
Además, sostiene que la crisis actual empeora la situación y "ahora los quirófanos están aún más restringidos", lo que está provocando que el intervalo de espera para realizarse la operación sea "de varios años". Para él, esta intervención es necesaria, más aún sabiendo que "en Europa no se cuenta con ningún medicamento aprobado que ayude a perder peso".
Otra razón por la que apuesta por la cirugía bariátrica es que "ha dado un cambio sustancial, al ser más accesible y segura por vía laparoscópica", lo que ha reducido notablemente la tasa de mortalidad, que "está por debajo del 0,5 por ciento".
Por su parte, otro de los miembros del Comité Organizador y representante en este caso de SECO, el doctor Antonio Torres, mantiene que la pérdida de peso que se consigue "repercute en una reducción de entre un 30 por ciento y un 50 por ciento del riesgo de mortalidad por enfermedad cardiovascular".
De cualquier forma, los expertos concluyen que la cirugía "debería ser el último escalón de tratamiento, cuando se han agotado el resto de opciones". Por ello, insisten en la importancia de contar con fármacos para la pérdida de peso.