MADRID 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio, publicado en 'Biology Letters', y llevado a cabo por la experta en Antropología Evolutiva de la Universidad de Rutgers, Erin Vogel, examina cómo los orangutanes en peligro de extinción en Indonesia - considerados parientes cercano de los seres humanos - sobreviven en tiempos de escasez extrema de alimentos. Estas observaciones podrían ayudar a los científicos a obtener una mejor comprensión de los trastornos alimentarios y la obesidad en los seres humanos.
"Hay una gran epidemia de obesidad en la actualidad, y todavía no entendemos muy bien las base de esta condición o cómo funcionan las dietas altas o bajas en proteínas", explica Vogel, cuya investigación sobre los orangutanes de Borneo ante una escasez de proteínas representa la primera vez que los científicos han analizado cómo estos animales - que dependen de frutas bajas en proteínas para sobrevivir - soportan periodos de privación de proteínas.
Según Vogel, del Departamento de Antropología y el Centro de Estudios de la Evolución Humana, la investigación demuestra que los orangutanes engordan sólo durante períodos de alta ingesta de proteínas, un hecho científico a veces ignorado por aquellos que creen que las dietas altas en proteínas y bajas en carbohidratos son la mejor manera de perder peso.
La investigadora explica que cuando la ingesta de calorías se restringe, los orangutanes utilizan estas reservas de grasa para obtener energía y, finalmente, echan mano de sus proteínas de reserva (músculos) - una condición comparable a trastornos alimentarios como la anorexia.
Los orangutanes, en particular, son interesantes para el estudio, según Vogel, porque son la única especie documentada de primates no humanos que almacena grasa cuando el alimento es abundante en la naturaleza y usan estas reservas cuando las frutas escasean.
Vogel y su equipo de investigación analizaron muestras, recogidas durante un periodo de cinco años, para estudiar los efectos del reciclaje de proteínas, incluyendo el examen de metabolitos en la orina e isótopos estables de nitrógeno -compuestos y derivados de la orina de orangután. Según indican los hallazgos, estos primates son capaces de soportar un déficit prolongado de proteína sin morir de hambre consumiendo hojas y cortezas, y obteniendo energía de la grasa acumulada en su cuerpo.
"Hemos descubierto a través de esta investigación que la cantidad diaria de proteína que los orangutanes toman cuando la fruta no está disponible es inadecuada para los seres humanos y una décima parte de los gorilas; pero es suficiente para evitar un déficit de proteínas grave", afirma Vogel .
La población de orangutanes de Borneo se ha reducido drásticamente en los últimos 50 años en Indonesia a y en la isla de Sumatra, debido a la enorme cantidad de tala ilegal y la limpieza posterior de la tierra para desarrollar plantaciones de palma aceitera. Según Vogel, aunque algunas empresas de aceite de palma argumentan que la limpieza de algunas zonas no es perjudicial para la existencia de los orangutanes, este estudio sobre el ciclo de proteínas indica que, incluso las áreas que han sido parcialmente despojadas de árboles son mejores para la supervivencia de los orangutanes que un área despejada del todo.