15 hospitales españoles participan en un estudio que ha encontrado una nueva pauta de tratamiento para el cáncer platino-resistente
CHICAGO, 3 Jun. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Salvador Alcaide) -
Un estudio internacional liderado por científicos de la Universidad de París Descartes (Francia) que ha contado con la participación de 15 hospitales españoles ha probado con éxito una nueva combinación terapéutica con la que han conseguido retrasar de forma significativa la evolución del cáncer de ovario platino-resistente, considerado como el de peor pronóstico de estos tumores.
Dicho avance ha sido posible al unir quimioterapia y el agente biológico bevacizumab y, tras los datos presentados en la 48 Reunión Anual de la Sociedad Americana de Oncología Médica (ASCO, en sus siglas en inglés) que se celebra estos días en Chicago, los autores del estudio están convencidos de que se encuentran ante un "futuro estándar de tratamiento" para este subgrupo de afectadas, cuyas opciones hasta el momento son "muy limitadas".
De los más de 3.000 nuevos casos de cáncer de ovario que hay cada año en España, el 80 por ciento se detecta en fase avanzada ante la falta de marcadores fiables que favorezcan un diagnóstico precoz. Tras la intervención quirúrgica y un primer tratamiento quimioterápico con platino, una de cada cuatro pacientes desarrolla una resistencia a este tratamiento. No obstante, este porcentaje de mujeres platino-resistentes es mayor ya que más de la mitad acaba recayendo de la enfermedad y, por tanto, requiere un nuevo ciclo de quimioterapia.
"Ante estas resistencias, los tratamientos que teníamos hasta ahora eran poco activos y eficaces", ha señalado el investigador Andrés Poveda, presidente del Grupo Español de Investigación de Cáncer de Ovario (GEICO) que ha participado en el estudio. De hecho, ha añadido, "hay ocasiones en que, cuando la paciente no está bien, se considera la opción de no tratar". Sin embargo, los beneficios ofrecidos por bevacizumab, fármaco que la farmacéutica suiza Roche comercializa como 'Avastin', como primera línea de tratamiento de estos tumores junto con quimioterapia --indicación para la que ya cuentan con el visto bueno de la Agencia Europea del Medicamento (EMA)-- llevaron a los investigadores de este estudio a probar con esta combinación también en este subgrupo de pacientes.
De este modo, y tras combinar dicho fármaco con distintos regímenes de quimioterapia en 361 pacientes, 51 de ellas españolas, comprobaron como el riesgo de recaída se reduce hasta en un 52 por ciento en comparación con la quimioterapia en solitario.
"Es la primera vez que se consigue que una terapia biológica resulte eficaz en este tipo de tumores platino-resistentes", ha asegurado Poveda. Asimismo, las pacientes tratadas con esta combinación estuvieron una media de 6,7 meses sin que la enfermedad avanzara, frente a los 3,4 meses de aquellas pacientes tratadas sólo con quimioterapia. Unos resultados "muy esperanzadores para pacientes que tienen tan mal pronóstico", ha insistido.
LAS PACIENTES VEN MEJORAR SU CALIDAD DE VIDA
El estudio también ha mostrado que, pese a añadir un nuevo fármaco, la toxicidad no aumenta, mientras que un análisis de la calidad de vida también ha puesto de manifiesto como estas pacientes viven más tiempo sin síntomas.
Entre los problemas más molestos para estas pacientes destaca la ascitis, una acumulación de líquido en el abdomen que obliga a extraerlo y que implica frecuentes pinchazos, causando además sensación constante de ocupación, disminuyendo la capacidad de ingesta de las pacientes, e incluso provocando sensación de náuseas.
Sin embargo, el estudio ha revelado cómo esta nueva combinación de fármacos permite un mejor control de esta complicación, lo que se considera "un logro en la búsqueda de ampliar el tiempo sin síntomas", ha asegurado este experto, que está convencido de que las autoridades regulatorias acabarán dando el visto bueno a esta combinación como ya han hecho con bevacizumab en primera línea.
Los hospitales españoles participantes en el estudio han sido el Santa Creu i Sant Pau, el Vall d'Hebrón, el Hospital de Terrassa, el Parc Taulí, el Arnau de Vilanova, en Cataluña; el Gregorio Marañón, el MD Anderson y el CIO Clara Campal de Madrid; el Hospital La Fe y el Instituto Valenciano de Oncología, en la Comunidad Valenciana; el Hospital Reina Sofía de Córdoba; el Miguel Servet de Zaragoza; el Son Llatzer de Baleares; el Marqués de Valdecilla de Cantabria, y el Hospital Morales Meseguer de Murcia.