GINEBRA 24 Feb. (Reuters/EP) -
El comité de emergencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha decidido que es prematuro anunciar el fin de la pandemia declarada el pasado junio en todo el mundo, ya que aún existen demasiadas dudas sobre el comportamiento que podría tener el virus A/H1N1, a pesar de que parece estar bajando su influencia en Europa y Norteamérica.
Este comité, compuesto encargado de realizar recomendaciones confidenciales sobre la pandemia a la directora general de la OMS, Margaret Chan, se reunió durante dos horas y decidieron revisar en las próximas semanas la situación de la pandemia para decidir si llegó a su máximo nivel de actividad.
Según manifestó el doctor Keiji Fukuda, asesor de la dirección de la OMS sobre gripe A, los crecientes niveles de infección en el oeste de Africa y el riesgo generado por la próxima llegada del invierno en el hemisferio sur son fuertes preocupaciones para el comité. "Tenemos razones para estar intranquilos con lo que podría pasar cuando la mitad del mundo ingrese en los meses del invierno", apuntó Fukuda.
El especialista indicó que la agencia de salud de Naciones Unidas había confirmado un aumento de las infecciones en Senegal y Mauritania y que estaba analizando si el virus de la gripe A se estaba propagando por otras regiones del oeste de Africa.
Así, Fukuda instó a los individuos y a los gobiernos a no bajar la guardia a pesar de que el actual brote de gripe A no fue tan severo como las pandemias que causaron la muerte de millones de personas en el siglo pasado. "Esta pandemia parece estar en el extremo menos grave del espectro de pandemias que hemos visto en el siglo XX", reconoció.
Hasta ahora, la gripe A ha causado 16.226 muertes en todo el mundo, según datos de la OMS. No obstante, se trata de una cifra subestimada, ya que son pocos los pacientes son diagnosticados o sometidos a pruebas para detectar el virus pandémico. Para la OMS,
deberán pasar entre uno y dos años para que la pandemia concluya y pueda establecerse la verdadera cifra de muertos.
Mientras tanto, los ciudadanos deben seguir vacunándose contra la gripe A, que es particularmente peligrosa para jóvenes con enfermedades crónicas y mujeres embarazadas. Según Fukuda, hasta ahora 300 millones de personas han sido protegidas contra la gripe pandémica en el mundo con vacunas seguras y con una efectividad del 70 y 75 por ciento.
Si el comité decide que la pandemia entró en un período posterior a su pico de actividad, esto significará que el virus, aunque sigue siendo una pandemia global, se halla en transición hacia los niveles habituales de la gripe estacional. Esto llevaría a los gobiernos y las autoridades de salud a revisar sus medidas de emergencia.