La OMC entrega mañana en Madrid sus medallas de oro a 5 organizaciones de médicos que ayudan en desastres y emergencias

Actualizado: jueves, 11 febrero 2010 12:27

Los premiados representan a todos los facultativos que colaboran en misiones humanitarias

MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Organización Médica Colegial (OMC) otorgará mañana, a las 12.30 horas en Madrid, las medallas de oro que reconocen la 'Condición de Colegiado de Honor Nacional' al SAMUR, el SUMMA, DYA, Médicos sin Fronteras (MSF) y Médicos Mundi, cinco organizaciones elegidas para representar a todos los médicos que prestan su ayuda en todos los desastres y emergencias. Se trata de la primera vez que este galardón se concede a organizaciones y no a médicos.

En este acto, que tendrá lugar en la sede del Consejo General de Colegios de Médicos en Madrid, se presentará también oficialmente la nueva Fundación Red de Colegios Médicos Solidarios, una iniciativa que trabajará para mejorar la atención sanitaria y social que reciben los colectivos más desfavorecidos.

En concreto, entre las funciones de esta fundación se encuentran las intervenciones en cooperación internacional --mediante la elaboración y ejecución de programas sanitarios directamente o a través de ONG-- o el asesoramiento en el diseño y desarrollo de proyectos sanitarios o actividades docentes para capacitar a los profesionales sanitarios.

Cerrará la entrega de medallas con la conferencia 'El médico como modelo de conducta a seguir' el obispo de Bangassou (República Centroafricana), Juan José Aguirre. Conocido como "el obispo de los pobres", Aguirre trabajado como misionero en República Centroafricana.

Ordenado en el año 2000 como obispo de Bangassou, la capital del país, su diócesis es de un tamaño similar al de Andalucía y, aunque sufre enormes deficiencias sanitarias, trabaja actualmente en más de 25 proyectos humanitarios a través de la Fundación Bangassou, de la que es presidente.

"Cuando se habla aquí de crisis me hace reír", señala este obispo, quien asegura también que, "cuando tiemblan los países grandes, los pequeños se hunden y se recorta la ayuda humanitaria". No obstante, se muestra agradecido por la ayuda constante que recibe y la solidaridad para afrontar lo mucho que queda por hacer, ya que, "a pesar de las enfermedades y los peligros, la gente encuentra razón para vivir".