MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
Ocho personas han muerto en Malí a causa del virus del ébola, la última un médico que atendía a enfermos en Bamako, la capital del país, desde que se inició un brote que se ha extendido por ocho países.
El responsable de la respuesta gubernamental en Malí frente al ébola, Samba Sow, ha informado a la agencia Reuters de que este médico trabajaba en la clínica de Bamako donde fue ingresado el imán Oussa Koita, que llegó en noviembre desde Guinea.
El resto de los casos corresponden a cuatro pacientes confirmados y dos casos sospechosos, además de una niña de dos años que viajó de Guinea a la ciudad maliense de Kayes, según los datos de Médicos Sin Fronteras.
En el informe que hizo público este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que recoge datos de la enfermedad hasta el 16 de noviembre, se informó de que en Malí había seis casos confirmados y probables, y cinco personas habían muerto. Los casos más recientes se han producido en la capital maliense de Bamako, y no están relacionados con la primera paciente EVD-positiva del país, que murió el 24 de octubre.
A todos los contactos identificados relacionados con este caso inicial se les ha estipulado 21 días de seguimiento. Sin embargo, cabe tener en cuenta que este informe se da con una semana de retraso.
La OMS, en el mismo informe, elevó a 5.420 muertos y 15.145 casos el balance de víctimas por el brote de ébola iniciado en Guinea y extendido a otros, entre ellos España.
Según sus cálculos, la lista de países afectados por el ébola asciende a ocho (Liberia, Guinea, Sierra Leona, Estados Unidos, Malí, Nigeria, Senegal y España). En todos ha habido contagios de trabajadores sanitarios y 329 han muerto por ébola, según el informe de la OMS.