La inmunización de la fiebre amarilla y la quimioprofilaxis para la malaria, lo más recomendado en los centros de vacunación internacional
MADRID, 26 May. (EUROPA PRESS) -
Ocho de cada diez españoles que viajan a países con riesgo sanitario no van adecuadamente protegidos con las vacunas necesarias o recomendadas, según asegura la directora general de Salud Pública y Sanidad Exterior, Carmen Amela, con motivo de la puesta en marcha de la campaña 'La salud también viaja 2011'.
Actualmente hay en España 84 centros de vacunación internacional en los que se facilitan información personalizada y recomendaciones de vacunación a aquellos ciudadanos que viajan a otros países. Según datos de 2010, en el último año atendieron a 191.087 viajeros.
Sin embargo, lamenta Amela, estos viajeros "apenas son un 20 por ciento de todos los que realmente viajan a estos países", sin contabilizar aquellos que se informan a través de Internet, "una vía que se utiliza cada vez más por los ciudadanos".
Lo adecuado, explica esta experta, es acudir a uno de estos centros un mes y medio antes del viaje o llamar al teléfono de atención al ciudadano 901 400 100, para conocer la situación sanitaria del país y las medidas de prevención que deben adoptarse.
Este periodo de antelación permite que "si hay que poner una vacuna ésta pueda ser efectiva", ya que hay algunos de estos tratamientos que necesitan varios días e incluso semanas para ser efectivos.
En este sentido, en 2010 se administraron en estos centros un total de 312.443 vacunas, siendo las más habituales las de la fiebre amarilla (72.107), la de la fiebre tifoidea (57.967), la hepatitis A (54.285) y el tétanos-difteria (29.599).
Igualmente, para la prevención de la malaria, patología tropical más relevante para la que todavía no existe vacuna, se prescribieron durante el pasado año 100.417 indicaciones de quimioprofilaxis con medicamentos antipalúdicos.
Asimismo, estos centros ofrecen a los viajeros medidas preventivas para evitar los riesgos relacionados con los alimentos y bebidas, con el entorno (sol, altura o insectos), con la higiene personal o con las enfermedades de transmisión sexual.
Para ello, los expertos de estos centros tienen en cuenta factores personales (edad, sexo, historia clínica, estado vacunal) y elementos asociados al viaje que van a realizar (países de destino, duración y tipo del viaje, época del año).
RECOMENDACIONES "SENCILLAS" A TENER EN CUENTA
En general, son recomendaciones "sencillas", explica Amela, que pasan por "no comer fruta pelada, alimentos frescos, lavarse las manos, no consumir hielo o lavarse los dientes con agua embotellada".
De hecho, reconoce que "es bueno incorporar estas medidas en todos los viajes porque hay países que parecen seguros para algunos pero que, en realidad, no lo son".
La directora general de Salud Pública también recomienda que, si a la vuelta del viaje presentan algún síntoma o trastorno, es preciso que indiquen a los médicos que han estado en un país extranjero, porque "va a facilitar el diagnóstico y el manejo de la enfermedad".
"Se registran algunos casos de malaria, dengue o algunas diarreas a la vuelta de las vacaciones, lo que demuestra que, pese a que todos los años se realizan estas campañas, hay viajeros que no se asesoran adecuadamente ni van protegidos como deberían", ha concluido.
