OMS
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Actualizado: jueves, 6 junio 2013 12:51

MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de publicar una guía en la que recoge los problemas de obesidad y desnutrición infantil que se están produciendo en los países de ingresos bajos y medianos, y que considera como "una doble amenaza".

A juicio de la organización, la lucha de estas naciones por combatir la desnutrición en los niños están desembocando en que aparezcan menores con sobrepeso y obesidad, situaciones ambas que son "amenazas para la salud", además de que representan "una creciente carga de enfermedades".

Los Gobiernos de estos países están "descuidando" estos problemas al centrar sus políticas en esta tarea, explican. Ello ha derivado en que, actualmente, "más del 75 por ciento de los niños con sobrepeso vivan en países en desarrollo" y en que la prevalencia en África "casi se haya duplicado en los últimos 20 años", subrayan.

Ante ello, y con el objetivo de "ayudar a los países", la OMS indica en su nuevo documento 24 acciones para mejorar el estado nutricional de las poblaciones. Así, señalan que "hay muchos factores durante el embarazo y la infancia que pueden influir el sobrepeso a un niño y, posteriormente, al adulto".

Entre las medidas aconsejadas destacan las de "mejorar la nutrición de las mujeres embarazadas y lactantes; alentar el inicio temprano de la lactancia materna; promover los alimentos sólidos apropiados para los niños pequeños, y proporcionar suplementos de micronutrientes y alimentos fortificados cuando sea necesario".

En este sentido, el director del Departamento de Nutrición para la Salud y el Desarrollo de la OMS, el doctor Francesco Branca, indica que, aunque es "vital" mantener los esfuerzos contra la desnutrición, el mundo "necesita hacer mucho más para prevenir y atender el creciente número de personas que tienen sobrepeso o son obesos y que viven en países de bajos y medianos ingresos".

SÓLO UN TERCIO DE ESTOS PAÍSES REGULA LA ALIMENTACIÓN INFANTIL

Según expone el experto, y tras realizar una encuesta entre las naciones, "sólo un tercio de los países regula la comercialización de alimentos para los niños y sólo unos pocos han tomado medidas para reducir la sal en la comida".

Debido a que la política contraria puede "reducir la mortalidad infantil, mejorar el crecimiento y el desarrollo, y optimizar la productividad", reclama esta modificación. Así, señala a Brasil, Etiopía y Perú como algunas de las naciones que han tenido éxito con esta medida.

En cuanto a las cifras que presentan estos problemas, Branca señala que "más de 100 millones de niños menores de cinco años tienen bajo peso, 165 millones sufren retraso del crecimiento y 43 millones tienen sobrepeso o son obesos". Además, se estima que "el 35 por ciento de las muertes de menores de cinco años están asociadas con la desnutrición".

Por todo ello, y debido a la fecha límite marcada en 2015 por la Asamblea Mundial de la Salud para alcanzar los 'Objetivos de Desarrollo del Milenio', el especialista anima a los países a analizar las medidas aportadas.

Entre estas metas se encuentran las de "conseguir un 40 por ciento de reducción en el número de niños menores de 5 años con retraso del crecimiento, un 50 por ciento en el número de mujeres en edad reproductiva con anemia, y un 30 por ciento en el de bebés con bajo peso al nacer", concluye.