MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de científicos del Centro de Investigación Biomédica EuroEspes (CIBE), dirigidos por el doctor Ramón Cacabelos, estudia un nuevo bioproducto, bautizado con el nombre de atremorine, para el tratamiento de la enfermedad de Parkinson, según informa EuroEspes.
El principio bioactivo de atremorine --registrado como E-Favalin-10729-- se obtiene del extracto vegetal de 'vicia faba', una variante de planta de la familia de las fabáceas, en la cual Guggenheim había detectado altos niveles de L-DOPA en 1913.
En 1967 se introdujo por primera vez el uso de L-DOPA en el tratamiento del Parkinson y en 1992, el grupo de Korczyn, en Israel, realizó los primeros estudios con éxito en este tipo de pacientes que, en lugar del tratamiento antiparkinsoniano convencional, tomaban una cantidad definida de 'vicia faba' herbida.
En la actualidad, el Parkinson se trata con una gama de medicamentos cuya acción principal es potenciar los niveles de dopamina, que se hallan disminuidos en el cerebro de estos pacientes.
Los tratamientos contra el Parkinson son altamente eficaces en un número reducido de pacientes; pierden efecto con el tiempo, requiriendo incrementos graduales de dosis, y provocan importantes efectos secundarios que se acentúan con su uso crónico.
La principal contribución de atremorine es su poderosa acción dopaminérgica. Una sola toma de entre 5 y 10 gramos de atremorine aumenta los niveles de dopamina de un 500 por cien a un 4.000 por cien a los 30 minutos, con una duración del efecto de más de 12 horas, mejorando en paralelo los síntomas cardinales del Parkinson: temblor, bradicinesia y rigidez.
El efecto de atremorine se debe a que los principios activos de 'E-Favalin-10729' no sólo activan la génesis de dopamina a partir de L-DOPA, también activan mecanismos regulados por GABA (ácido gamma-amino-butírico) y reducen la neurotransmisión serotonérgica, cuya hiperactivación disregula al sistema dopaminérgico mesolímbico y altera la función psicomotriz.
Los científicos del grupo EuroEspes trabajan también en el desarrollo de nuevos fármacos para el Alzheimer y el ictus, incorporando a su desarrollo protocolos de farmacogenómica.
La división industrial del grupo, EuroEspes Biotecnología, prepara el lanzamiento inmediato de una nueva serie de productos nutracéuticos con actividad sobre sistema nervioso, regulación de lípidos, arteriosclerosis y cáncer.