Nueva vía para tratar enfermedades inflamatorias crónicas

Macrófago
CSIC
Actualizado: viernes, 28 mayo 2010 16:14

MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) -

Un equipo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en colaboración con la Universidad de California, ha descubierto que el receptor nuclear X retinoide (RXR) regula la respuesta inmunitaria innata del organismo, lo que puede abrir una nueva vía para el tratamiento de enfermedades que cursan con inflamación crónica.

Según publica en su último número la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences' (PNAS), los investigadores generaron ratones que carecían de estos receptores en los macrófagos (un tipo de células del sistema inmunitario) y observaron que en su sangre había menores niveles de quimioquinas que en los animales control.

Estas proteínas, las quimioquinas, provocan la migración de los glóbulos blancos a las zonas inflamadas. Además, cuando sufrían peritonitis, el grado de inflamación y el número de leucocitos en la zona de la herida eran menores que en ratones normales.

Del mismo modo, también eran menos susceptibles al choque séptico, un fallo circulatorio agudo causado por infección y que constituye una de las mayores causas de muerte entre los pacientes hospitalizados en unidades de cuidados intensivos.

Los receptores nucleares son un tipo de proteínas celulares que, cuando se unen a otras moléculas (llamadas 'ligandos') regulan la expresión de multitud de genes. En concreto, el RXR está implicado en la respuesta inmune. En principio, al matar a los patógenos, la respuesta inmune evita que enfermemos pero, como explica el investigador Thierry Fischer, "una respuesta inflamatoria excesiva puede dañar e incluso matar al organismo dando lugar a un proceso conocido como choque séptico".

En este momento la industria farmacéutica está desarrollando ligandos de RXR para el tratamiento del cáncer y enfermedades metabólicas, por lo que los investigadores confían en que estos medicamentos pudieran ser también útiles para tratar el choque séptico.