MADRID 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
Neumólogos infantiles de prestigio reunidos en el XIV Symposium Internacional de Neumología que se celebra estos días en Sevilla buscan la forma de tratar infecciones respiratorias en bebés para reducir las posibilidades de futuros casos de asma en adultos.
Según explica Eduardo González Pérez-Yarza, neumólogo infantil y jefe de pediatría del Hospital Donostia de San Sebastián, las infecciones respiratorias en lactantes son puntuales y normalmente proceden de un virus banal, pero a veces pueden dar lugar al desarrollo de un cuadro respiratorio posterior pertenecientes al grupo del asma.
"El interés de los neumólogos infantiles en este aspecto es empezar a tratar al lactante que presenta estas infecciones respiratorias benignas y así poder disminuir los casos de asma en las etapas posteriores de la vida", afirma el doctor.
Pérez Yarza, además, recuerda que el asma es la enfermedad crónica con mayor incidencia y prevalencia en las edades tempranas se puede curar en el sentido que popularmente entendemos. "Entendemos que un niño está curado de asma cuando tiene una salud respiratoria normal, indistinguible de un niño sin asma con la menor medicación posible o sin ninguna, cuando hace una vida normal como cualquier otro niño de su edad", explica el neurólogo.
RECOMENDACIONES
En este sentido, el doctor recomienda a quienes presentan un diagnóstico de asma una serie de hábitos respiratorios, a su modo de ver, "muy razonables", como no fumar en la casa, porque, afirma, los humos nocivos se permanecen durante 28 horas.
Además, pide que se eviten todos los productos con olor y aerosoles como desodorantes o ambientadores así como que se laven las sábanas por encima de 60 grados, porque ahí están muy presentes los ácaros que pueden desencadenar un ataque de asma. Por último, recomienda limpieza general en los hogares y buena ventilación.
Señala que lo "ideal" es que se realice un "diagnóstico precoz" en el bebé para "poder poner en práctica los tratamientos oportunos lo antes posible y así poder contribuir a la mejora de la calidad de vida de estos pacientes". El asma se puede diagnosticar en niños de tan sólo 6 meses.
El objetivo de los neumólogos infantiles en estos últimos años en toda Europa es combatir el asma del bebé a la vez que combatimos el asma del niño de modo que, cuando crezca, "se está combatiendo la salud respiratoria en el bebé y en gente adulta".