BARCELONA, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) pidió hoy la "prohibición absoluta" del tabaco en espacios públicos cerrados y mostró su respaldo al Ministerio de Sanidad y Consumo en su voluntad de desarrollar la Ley Antitabaco.
La ley, en vigor desde enero del 2006, redujo un tercio el consumo de tabaco en espacios públicos, pero el presidente de SEPAR, Julio Ancochea, afirmó hoy que es necesario "avanzar en el desarrollo de la ley" con el objetivo de proteger a todos los fumadores pasivos y a los menores de edad.
La hostelería y el ocio son los sectores más afectados por el incumplimiento de la ley Antitabaco, ya que más de 800.000 trabajadores están expuestos al humo del tabaco a pesar de que la ley prohíbe fumar en el puesto de trabajo.
En este sentido, la SEPAR está a favor de la "prohibición absoluta" del tabaco en espacios públicos cerrados, como ya ocurre en 8 países de la Unión Europea, entre ellos Italia e Irlanda.
Este avance en la ley, según los neumólogos, es importante porque la situación actual vulnera un derecho fundamental de los trabajadores del sector de la hostelería y el ocio además de tener graves consecuencias para su salud presente y futura, tal y como lo interpreta la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El coordinador del Área de Tabaquismo de SEPAR, Juan Antonio Riesco, aseguró que "es una cuestión de salud pública profundizar en la protección del fumador pasivo, ya sean trabajadores como clientes", recordando que el tabaquismo pasivo provoca unas 5.000 muertes anuales, siendo la tercera causa de muerte evitable.
Riesco también subrayó que la ampliación de la ley protegería a los niños de respirar humo de tabaco, factor importante ya que "sus pulmones están en pleno desarrollo y la atmósfera contaminada puede producirles importantes consecuencias en su salud respiratoria", provocando asma bronquial y mayor riesgo de infecciones reasporatorias.
La SEPAR también recordó que el hecho de permitir fumar en lugares públicos como bares y restaurantes hace que los adolescentes asocien el tabaco a los momentos de ocio, lo que unido al mal ejemplo que ofrecen muchos de sus mayores, fomenta su adicción. Señaló que la de edad de inicio en el hábito tabáquico se ha reducido hasta los 13 años.