Recomiendan comer despacio y masticar bien los alimentos, no comer en exceso y evitar abusar de las carnes y grasas
MADRID, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -
La llegada de la Navidad conlleva para la población una alteración en la rutina profesional y familiar, pero sobre todo en los hábitos alimenticios que, tal y como alerta el secretario de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), el doctor Miguel Ángel Rubio, puede representar en la población una ganancia de entre dos y cuatro kilos de promedio.
El problema ha surgido en los últimos años, según ha explicado en una entrevista a Europa Press, ya que el periodo navideño ya no se acota a los días específicos de Navidad, sino que, "como media, viene a durar un mes", porque "los productos típicos de estas fechas se empiezan a consumir desde que aparecen en las estanterías de los supermercados y semanas antes se está acudiendo a comidas por estas fiestas".
Y, como este abuso no tiene edad, "el incremento en el peso afectará tanto en niños como en adultos como en ancianos". Además, recuerda que el problema viene al acabar las fiestas cuando uno trata de eliminar esos kilos de más, que "se ganan en 15 o 20 días pero pueden costar quitarse más de dos meses".
"Uno se mete en la dinámica que coger peso en Navidad, pero también en Semana Santa y en verano, y llega un momento que estos dientes de sierra de subidas y bajadas pueden dejar de funcionar, y, al final, solo se sube peso o se pierde nada más que la mitad", añade.
La comida navideña en sí misma no tiene mucho valor calórico, ya que suelen ser menús compuestos por pavo, besugo ó mariscos, el problema, recuerda, son los aperitivos y las bebidas que acompañan a la cena, además de los dulces propios de esta época. "Una tableta o polvorón tiene como mínimo 100 calorías, por lo que si se digieren tres polvorones y dos trozos de turrón se puede ingerir unas 500 calorías de un modo fácil", explica.
Además, hay que añadir, como explica el director general de la Asociación para el Autocuidado de la Salud (Anefp), Rafael García Gutiérrez, que en estas fechas, precisamente debido a los excesos, aumentan el número de empachos, acidez, digestiones pesadas y resacas. Y, en los peores casos, pude producir diarreas, náuseas y vómitos.
PROBLEMAS SERIOS
Una de las dolencias más frecuentes de la época navideña son los empachos. "Si presentamos dolor de estómago, sensación de pesadez, ardor acompañado de acidez e incluso vómitos, estamos ante los síntomas de un empacho", explica el director general de Anefp, aunque suele remitir que controlando la alimentación o, si es necesario, con los medicamentos adecuados.
Aunque, como explica el doctor Rubio, el empacho puede producir problemas serios en algunos casos. "No será la primera vez que una sobre ingesta de alcohol provoca un cuadro clínico más grave como una pancreáticas aguda, que es motivo de hospitalización y puede tener una alta morbilidad, es decir muchas complicaciones e incluso mortalidad", señala.
Además, recuerda que aquellas personas que tengan alteraciones de las grasas tienen que tener más cuidado con el consumo de alimentos, ya que "puede existir un aumento muy exagerado de lípidos en sangre que se pueden depositar donde no deben, o producir pancreatitis".
Asimismo, pone especial énfasis en niños y ancianos. En los primeros recomienda que se controle la ingesta de azúcar, ya que "se pueden empachar sólo con los dulces y no comer nada más, por eso hay que darles los dulces racionados"; en el segundo caso recuerda que es importante "no descuidar la hidratación, aumentando el consumo de sopas y caldos no calóricos".
"HUIR DEL PICOTEO NAVIDEÑO"
Para evitar que se produzcan estas molestias los expertos aconsejan comer despacio y masticar bien los alimentos, no comer en exceso, evitar abusar de las carnes y grasas y sustituirlas, siempre que sea posible, por verduras o alimentos ricos en fibras. Y, por supuesto, no abusar del alcohol y el tabaco.
"Lo mejor es prevenir, no comer de casi nada, salvo en lo compromisos y, en la medida de lo posible, huir del picoteo navideño antes de las fiestas establecidas", explica el doctor Rubio.
Para aquellos que no pueden evitar acudir a múltiples eventos --además de los estrictamente familiares-- con motivo de estas fechas navideñas, el experto recomienda comer de forma ligera (frutas, ensaladas, zumos), de modo que se compense la ingesta de calorías.
Posteriormente, "realizar una dieta que hidrate mucho y ligera"; además recuerda que hacer algo de ejercicio o pasear tras la comida ayuda a reducir las calorías.
En el caso de que aparezcan pequeñas dolencias propias de las fiestas navideñas, por no haber controlado el consumo de bebida y comida, desde la Anefp los medicamentos para el autocuidado de la salud, autorizados por el Ministerio de Sanidad que se pueden adquirir en la farmacia sin necesidad de una receta médica.
"Se debe actuar de forma responsable y utilizar los medicamentos destinados al autocuidado de la salud siempre bajo el consejo del profesional farmacéutico, que aconsejará el tratamiento más adecuado para cada caso, y, si fuese necesario, aconsejará acudir al médico", explica García Gutiérrez.