PAMPLONA 27 May. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Parlamento de Navarra ha aprobado este jueves la toma en consideración de la proposición de ley foral de Salud Mental de Navarra por la que se establece la estructura orgánica de la Dirección de Salud Mental del Servicio Navarro de Salud. Votaron a favor, además del PSN, Nafarroa Bai e IUN, mientras que UPN y CDN lo hicieron en contra.
La propuesta introduce una nueva estructura que busca ofrecer una mejora sustancial para los enfermos, sus familiares y el conjunto de la sociedad. Los objetivos de esta iniciativa se centran en el respeto a los usuarios en la definición de sus necesidades, la implantación de sistemas de calidad en los centros públicos y concertados, el establecimiento de un sistema de información que permita la comunicación, coordinación e integración de actuaciones entre los distintos dispositivos asistenciales y la adopción de guías de prácticas clínicas.
Entre los propósitos añadidos de esta proposición se encuentran la creación de mecanismos, instituciones y redes para establecer las condiciones de implantación de los principios de la Estrategia Nacional y la puesta en marcha de medidas organizativas y presupuestarias que garanticen la participación en los procesos de mejora de la calidad. La iniciativa plantea una gestión por procesos.
La socialista María Chivite manifestó, en la defensa del texto, que esta propuesta es un "paso decisivo y necesario" para mejor la salud mental. A su juicio, es "necesaria una segunda reforma en la salud mental en Navarra, una necesidad que es compartida por los profesionales, familiares y enfermos".
Criticó la parlamentaria que hay en Navarra un "déficit asistencial y organizativo" en la salud mental. "La red de salud mental funciona en sus límites", criticó al tiempo que manifestó que no hay una definición de qué papel juega la salud mental en la Comunidad foral.
Por NaBai, Asun Fernández de Garaialde es "importante" crear una ley para que se adopten medidas tanto "organizativas como presupuestarias", para la reorganización de los servicios de salud mental y para la adecuación de los centros y recursos a las necesidades actuales, entre otros asuntos, pero consideró "triste" que se tramite por ley "frente a quien desde el sistema público no quiere que se organice".
Ana Figueras, de IUN, manifestó que es "fundamental", y "sin más dilación", la atención a la salud mental en Navarra. No obstante, señaló que "si no hay voluntad por los grupos que pensamos que se puede trabajar de otro modo en la salud mental es sencillamente un brindis al sol", expuso.
En el turno en contra, Javier Marcotegui, de UPN, indicó que la proposición de ley "puede ir contra la estrategia de la salud mental" y consideró que "no tiene en sí misma justificación alguna". "Se definen unos objetivos pero sólo trae unas muletas", señaló.
Por su parte, José Andrés Burguete, de CDN, señaló que esta propuesta es una "clara intromisión del Parlamento en la gestión y competencia del Gobierno de Navarra" y añadió que su voto en contra a la toma en consideración "no quiere decir que respaldemos la política sanitaria del Gobierno, en la que hay mucho por mejorar".