WASHINGTON 4 Jun. (Reuters/EP) -
Dos mutaciones extra crean el escenario para que el virus de la gripe estacional evolucione a una forma que actualmente muestra resistencia a tres de los cuatro fármacos diseñados para combatirlo.
Un estudio, publicado en la revista Science, ofrece una manera para que los científicos estén atentos a peligrosas mutaciones en nuevos virus de gripe, incluyendo la actual pandemia de gripe H1N1, popularmente conocida como gripe A.
Sólo hay cuatro fármacos en el mercado para tratar la gripe y dos no funcionan contra virtualmente todas las cepas que están circulando debido a que los virus han desarrollado resistencia.
Tamiflu, conocido genéricamente como oseltamivir, es el fármaco de mayor uso. Viene en forma de una pastilla fabricada por Roche AG bajo la licencia de Gilead Sciences.
GlaxoSmithKline fabrica un fármaco que se inhala que funciona de manera similar llamado Relenza, o zanamivir genéricamente.
Ambos pueden ayudar a reducir los síntomas de la gripe si son tomados rápidamente y pueden mantener a los pacientes más vulnerables lejos del hospital, o mantenerlos vivos si están severamente enfermos. Pero hace dos años la cepa común que circulaba de H1N1 estacional desarrolló resistencia a Tamiflu.
Los doctores se mostraron sorprendidos debido a que la mutación que ayuda a los virus a evadir los efectos de Tamiflu usualmente también los convertía en virus débiles que no infectaban o no se expandía bien.
"La gente sabe de esta mutación H274Y por más de una década, pero la mutación pareció interferir con la capacidad del virus para duplicarse y propagarse", dijo en un comunicado Jesse Bloom del California Institute of Technology (Caltech), quien lideró el estudio.
"Algo ocurrió que hizo que los virus resistentes a Tamiflu también sean capaces de duplicarse y propagarse como los virus de gripe del tipo común", agregó.
Bloom y el doctor David Baltimore, experto en sida y en las funciones genéticas de células y virus en Caltech, lideraron un estudio para descubrir cómo ocurrió esto.
Descubrieron que otras dos mutaciones en el virus no sólo le permitían evadir los efectos de Tamiflu sino sobrevivir y propagarse.
Esto es importante para planificar tanto la gripe estacional como las pandemias. La gripe estacional causa la muerte a entre 250.000 y 500.000 personas cada año mundialmente.