MADRID 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Copenhague y de los Servicios de Salud Mental de Dinamarca han encontrado una mutación genética que incrementa el riesgo de desarrollar esquizofrenia, un descubrimiento publicado en 'Nature' que abre vías para conseguir en desarrollo de nuevos fármacos que combatan la enfermedad y no sólo sus síntomas.
En este estudio, el más extenso realizado sobre esquizofrenia hasta el momento, han participado cerca de 50.000 pacientes y sujetos control de 14 países europeos. El objetivo era mostrar la correlación entre las mutaciones congénitas y las diferentes áreas del genoma.
Según el coordinador del estudio, Thomas Werge, del Hospital Universitario de Copenhague, "la investigación ha dejado claro que la esquizofrenia no es una simple enfermedad, sino una extenso y variado grupo de circunstancias que pueden desencadenarse por muy diferentes razones y que pueden tener gran cantidad de formas de expresarse".
Una de las áreas genómicas que están mutadas en estos individuos en riesgo de desarrollar esquizofrenia está asociada con el sistema inmunológico. Durante algún tiempo, los investigadores han investigado la conexión entre esquizofrenia y sistema inmune basado en desproporcionado número de pacientes con esta enfermedad nacidos en invierno o primavera, cuando las gripes son más frecuentes.
Ahora han hallado cinco mutaciones, todas próximas dentro del área cromosómica que juega un papel importante en relación con los tipos de tejido humano y con la regulación de la forma en la que el sistema inmune responde a las infecciones.
Otra mutación está situada en un cromosoma cercano a un gen que regula la memoria y la inteligencia, las dos facultades humanas que suelen desestabilizarse en los pacientes con esquizofrenia. Esta última mutación se encontró en un gen que juega un importante rol en el desarrollo del cerebro.