MURCIA 7 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de la Profesión Médica de Murcia, formado por el Colegio de Médicos, Sindicato, sociedades científicas, Facultad de Medicina y estudiantes ha declarado que los facultativos "entienden" que, en esta situación de crisis, "todos debemos hacer un sacrificio", sin embargo, consideran que "el especial acento que se ha puesto en los recortes hacia la profesión médica provocará una disminución de la calidad de la asistencia".
AES Murcia comparte la opinión del Consejo de que pese a que el compromiso de los médicos es mantenerse firmes en el desempeño de su trabajo asistencial, cumpliendo con la responsabilidad que la sociedad les ha concedido, "el gobierno regional está creando una situación en la que resulta difícil continuar proporcionando salud, alivio y consuelo con la calidad y dedicación con la que venían haciéndolo", según han informado fuentes de Alternativa Española en un comunicado.
Del mismo modo, apoyan al Consejo en su declaración y considera que se responsabiliza "injustamente a los facultativos de la crisis, ya que se les impone el 50 por ciento de las medidas económicas anunciadas, y se les modifican las condiciones tanto retributivas como laborales, volviendo a situaciones previas a las transferencias sanitarias a las autonomías".
Para AES, este dato "es una nueva muestra del fracaso que supone en Murcia y en toda España el modelo sanitario gestionado por las autonomías", por lo que proponen "la vuelta a un sistema sanitario centralizado, equitativo y sin diferencias en prestaciones y calidad asistencial en función de la región española de residencia".
Asimismo, apuntan que se debe "denunciar que las medidas emprendidas contra el colectivo médico son claramente demagógicas, pues atacan a un colectivo minoritario, al que se recrimina su remuneración, de la cual es responsable la consejería, generando así hostilidad contra los médicos desde una parte de la sociedad".
Por otro lado, han considerado "imprescindible" que se asuman responsabilidades políticas por parte del gobierno regional, que desde esta institución se asuma el fracaso en su gestión y que dimitan los altos cargos de la consejería de sanidad.
Y es que, AES ha exigido que, en lugar de tomar medidas que perjudiquen la atención sanitaria de los ciudadanos, los recortes se centren en aquellos gastos "que en nada benefician a la salud de los murcianos, como son la disminución, también a niveles previos a la transferencia sanitaria, de la multitud cargos directivos dependientes de la consejería de sanidad y sus gerencias que se han creado desde entonces; los conciertos con negocios dedicados a provocar la muerte a niños gestantes; la financiación de la carísima y controvertida vacuna frente al virus del papiloma humano, o los gastos en publicidad y propaganda institucional".
Finalmente, el colectivo médico apoyará y participara "activamente en aquellas movilizaciones que en defensa de la calidad asistencial y del colectivo médico se lleven a cabo".