BARCELONA 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSCJ) ha confirmado la multa de 30.000 euros impuesta por la Generalitat a la Policlínica Barcelona por no informar adecuadamente a una paciente, no realizarle correctamente las pruebas pre y postoperatorias y darle de alta cuando todavía sufría anemia grave.
La Sección Segunda de la Sala Contencioso-Administrativa del TSJC ha estimado un recurso de la Conselleria de Salud y de la paciente María A.M. contra la sentencia que revocó la multa impuesta al centro médico.
La mujer fue operada el 25 de mayo de 2004 y los análisis de sangre posteriores mostraron alteraciones de hematíes, hemoglobina y hematocrito, indicadores que empeoraron tres días después.
Tras dos transfusiones de concentrado de hematíes, fue dada de alta el mismo día, aunque pocas horas después tuvo que ingresar en Urgencias del Hospital Sant Pau de Barcelona con anemia y una "herida con salida de líquido hemático".
Además, no consta que se le realizara una radiografía de tórax previa a la operación, ni análisis de sangre o prueba de coagulación. En la hoja de consentimiento de intervención no consta la firma del médico. En un informe médico no consta ni el nombre de la paciente, ni su edad, enfermedad ni número del colegiado que la atendió.
Por todo ello, el TSJC considera justa la sanción administrativa por infracción grave.