MADRID, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
Médicos Sin Fronteras acoge con satisfacción el anuncio del fondo de acceso a tecnología COVID-19 de la OMS (conocido por sus siglas en inglés C-TAP) y el Medicines Patent Pool (MPP) de la primera licencia voluntaria global, no exclusiva y transparente para una prueba de diagnóstico COVID-19.
La tecnología, ofrecida por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), es una prueba de anticuerpos capaz de cuantificar tres tipos diferentes de anticuerpos, y diferenciar las personas vacunadas de las que se han infectado de forma natural por COVID-19, con fines de vigilancia de salud pública.
"Con la puesta en marcha de los programas de vacunación, esta prueba es muy importante para medir el número de casos de COVID-19 en un país y el impacto de las medidas de control", señalan en una nota, en la que recuerdan que, desde diciembre de 2020, la OMS recomienda el uso de inmunoensayos cuantitativos (ELISA) para la vigilancia de COVID-19.
Hasta hoy, la OMS solo tenía una prueba ELISA de anticuerpos precalificada en su lista de uso de emergencia, la prueba ELISA Elecsys Anti-SARS-CoV-2 de la compañía Roche. Esta prueba solo se puede utilizar con el propio dispositivo de Roche, que no está disponible ni es adecuado para la mayoría de entornos con recursos limitados. Muchas pruebas ELISA disponibles en el mercado solo pueden identificar uno o dos tipos de anticuerpos.
"La licencia abierta del CSIC al fondo C-TAP de la OMS es un importante paso adelante para superar el monopolio de las grandes empresas de diagnóstico como Roche, y para facilitar la producción y el suministro de pruebas de anticuerpos ELISA fiables en todos los países", añade.
"MSF acoge con satisfacción el anuncio de la primera licencia abierta voluntaria y transparente para una prueba de diagnóstico de COVID-19. Dado que la OMS recomienda la prueba de anticuerpos ELISA para la vigilancia de COVID-19, esperamos que la licencia abierta de esta tecnología acelere ahora la producción local de esta prueba en países de ingresos bajos y medios para respaldar la vigilancia de COVID-19", ha señalado Stijn Deborggraeve, asesor de Diagnóstico, Campaña de Acceso de MSF.
En esta pandemia, ha añadido, "el acceso a pruebas de diagnóstico fiables es el primer y más importante paso para salvar vidas, y medir los casos de COVID-19 y el impacto de las intervenciones. No es lógico que incluso en olas catastróficas de esta enfermedad, que han provocado millones de muertes en todo el mundo, las corporaciones de diagnóstico hayan continuado monopolizando y acumulando pruebas críticas de COVID-19 para un puñado de personas y países privilegiados".