MADRID 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha afirmado este viernes que no ha hablado personalmente ni con el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ni con el consejero de Salud de la comunidad, Antonio Sanz, por la crisis de los retrasos de los cribados de cáncer de mama andaluces.
"Nosotros les hemos requerido toda la información, hemos hablado de manera institucional con ellos, les hemos pedido la información, y a partir de ahí, la comunidad andaluza en concreto no nos ha dicho ni que sí ni que no. No nos ha mandado nada, y no nos ha hecho respuesta a ningún requerimiento que le hemos hecho. Pero no, no hemos hablado personalmente", ha declarado García durante una entrevista en la Cadena SER, recogida por Europa Press.
Tras ello, ha recordado que el consejero andaluz estaba invitado al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), que se celebraba este viernes en Zaragoza, pero que ha sido boicoteado por las comunidades autónomas gobernadas por el PP tras denunciar "la utilización partidista y sectaria" de este órgano por parte del Gobierno.
En ese sentido, ha subrayado que este era el primer CISNS tras la crisis de los cribados y que "hoy tenían la oportunidad" de hablarlo, pero que este boicot supone una "deriva absolutamente cafre" por parte del PP.
En una entrevista posterior al programa 'Mañaneros 360' de TVE, recogida por Europa Press, García ha lamentado que "en plena crisis sanitaria con los cribados del cáncer de mama en Andalucía, el Partido Popular considere que pedirles información es un insulto". En cualquier caso considera que es una mala estrategia para las comunidades del Partido Popular que podrían haber provocado la "desconfianza" en sus regiones de que estos programas de cáncer estén funcionando.
"¿Por qué ocultan los datos? Sencillamente, los tienen que ocultar porque algo tienen que ocultar, porque si no, no hay quien se los explique", ha advertido la ministra, quien ha reiterado que ella "solo he pedido los datos". Asimismo, no cree que "en pleno año 2025, siglo XXI", la excusa para no enviar los datos se que no existen herramientas.
"Esa no puede ser la excusa. Es una excusa bastante zafia. Lo que está haciendo el Partido Popular es lo que hace siempre: Primero, insultar a las víctimas. Lo segundo, tirar balones fuera", ha añadido.