MADRID 17 Ago. (EUROPA PRESS) -
La mitad de los pacientes diagnosticados con una infección por VIH en España son diagnósticos tardíos y "candidatos a recibir antirretrovirales", según ha señalado a Europa Press el director del Plan Nacional sobre Sida, Tomás Hernández, quien asegura que cerca del 30 por ciento de las personas con VIH en España "viven con el virus y aún no lo saben".
A su entender, lo más importante para acabar con este problema es facilitar el acceso rápido a las pruebas diagnósticas, ya que "quien se sabe infectado cambia su conducta" para evitar nuevos casos. Toda persona que mantiene relaciones sexuales con un desconocido sin protección es, según recuerda Hernández, "candidato a someterse a la prueba del VIH".
Considera que las trasmisiones a propósito son "excepcionales" y por ello rechaza "criminalizar a las personas que trasmiten el VIH" llevándolas a juicio, como ha ocurrido recientemente con la cantante Nadja Benaissa, quien ha reconocido haber mantenido relaciones sexuales sin protección sin advertir previamente a sus parejas de que era portadora del virus.
Para Hernández, llevar estos casos a los tribunales puede hacer "que menos personas se decidan a someterse a las pruebas del VIH y que un mayor número decida no comunicarlo, lo que contribuye con el estigma y la discriminación". "Criminalizar la trasmisión es un error", insistió.
Se estima que entre 120.000 y 150.000 personas están infectadas por el VIH en España, una cifra que se mantiene en la mayoría de los colectivos de riesgo --incluso se redujo en 2009 entre los usuarios de droga inyectable--, pero que ha repuntado entre los hombres que mantienen sexo con hombres. Desde 1981 y hasta 2009, se han registrado 77.953 casos de sida en España.