MADRID, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las mujeres de 45 años o más que sufren de migrañas con síntomas neurológicos asociados como alteraciones temporales de la vista, algo que se conoce como "aura", poseen un mayor riesgo de episodio cardiovascular grave, según un estudio del Hospital de Brigham y las Mujeres y de la Escuela de Salud Pública de Harvard en Boston (Estados Unidos) que se publica en la revista 'Journal of the American Medical Association' (JAMA).
Los investigadores descubrieron que las mujeres que padecían migraña con aura tenían un mayor riesgo de ataque cardiaco, ictus isquémico, angina y mortalidad derivada de enfermedad cardiovascular isquémica en comparación con las mujeres que no tienen antecedentes de migraña. En contraste, la migraña sin aura, la forma más común, no se asoció con un mayor riesgo de ningún tipo de episodio cardiovascular.
Los científicos evaluaron la asociación de la migraña con o sin aura y el riesgo global y específico de enfermedad cardiovascular en 27.840 mujeres de 45 años o mayores que participaron en un estudio sobre la salud femenina y que no padecían enfermedad cardiovascular en el momento de iniciar el estudio, entre 1992 y 1995. Las participantes proporcionaron información sobre sus antecedentes de migraña, el estado actual, la existencia de aura y medidas de lípidos.
Los investigadores descubrieron que cualquier antecedente de migraña estaba asociado con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular grave. Este mayor riesgo difería según si padecían o no aura. En comparación con la ausencia de migraña, las mujeres que tenían migraña con aura tenían un mayor riesgo de episodios cardiovasculares graves, ictus isquémico, ataque cardiaco, revascularización coronaria, angina, y muerte debido a enfermedad cardiovascular isquémica.
Según los científicos, estos riesgos iban de un aumento de 1,7 veces en el caso de la revascularización coronaria a 2,3 veces en el de la mortalidad por enfermedad cardiovascular isquémica. En contraste, las mujeres con migraña pero sin aura no tenían un mayor riesgo de episodio vascular isquémico.
Los autores señalan que ya que la migraña sin aura es mucho más común que aquella con aura, los datos demuestran que no existe un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular para la mayoría de pacientes con migraña. Los investigadores consideran que para una mejor comprensión de la relación entre migraña, aura y episodios cardiovasculares deberán realizarse futuros estudios.