MADRID 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
Al menos una de cada tres mujeres con cáncer de mama ha tenido problemas para seguir trabajando por las repercusiones de una intervención derivada del tumor, lo que en muchos casos acaba en despidos o bajas voluntarias. Así lo ha denunciado la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA) este jueves, en el Día Internacional de la Mujer, en el que reclaman estrategias de igualdad laboral para el colectivo.
En concreto, la presidenta de FECMA, María Antonia Gimón, ha llamado a impulsar "estrategias que promuevan cambios culturales en el entorno laboral y en las entidades encargadas de definir las políticas sociales, salariales y de empleo para modificar actitudes culturales que se encuentran en la base de la discriminación y que representan el obstáculo más real y evidente para avanzar en la igualdad".
Para Gimón, esta situación de desigualdad se podría eliminar "favoreciendo un clima sensible a la situación de las afectadas que, a veces, se pueden solucionar asignándoles nuevas responsabilidades que no requieren esfuerzos físicos"
"Rechazamos la compasión y no reclamamos privilegios o alteraciones en el normal funcionamiento de la organización de los centros de trabajo, sino que planteamos la aplicación de la lógica y la necesaria adaptabilidad en estos casos", concluye.