MADRID 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
Ante las informaciones difundidas sobre la posible negociación para la concesión al País Vasco de competencias para homologar los títulos extranjeros de Medicina, el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) considera que esta decisión es "inédita" en el espacio europeo, "plantea un cambio que presenta muchos más inconvenientes que ventajas", y "obliga a la profesión médica a denunciar la misma" en todos los foros.
En primer lugar recuerda que la Constitución establece que es el Estado quien tiene la competencia exclusiva sobre la homologación de títulos académicos y profesionales; asimismo reitera la necesidad de que se establezcan y se cumplan los requisitos para ejercer de médico en España, en cumplimiento de las normativas europeas; y, finalmente, añade que al igual que otras ordenes médicas europeas tienen encomendada la homologación de títulos, se podría delegar esta gestión en el CGCOM con la participación del Foro de la Profesión Médica.
El primer argumento que sostiene es que no existen 17 sistemas de ordenación profesional, sino solamente uno, "por más que exista una tendencia de muchos a quedarse en el lugar donde han nacido o donde han cursado su formación de grado". Los médicos, enfermeras, y demás profesionales, una vez formados, pueden moverse y acabar trabajando en lugares muy diferentes (incluido el extranjero).
Por esto, la realización de Planes de Ordenación de Recursos Humanos en las Comunidades Autónomas (Artículo 13 del Estatuto Marco, Ley 55/2003), siendo necesarios no son suficientes, ya que el "mercado profesional" está construido a nivel español, y cada vez más en el ámbito europeo.
"Es verdad que algunas autoridades sanitarias y de función pública de las CCAA han puesto en marcha iniciativas para segmentar el mercado de trabajo, particularmente aquellas que tienen tanto idioma propio como sentimientos identitarios fuertes. Pero al hacerlo, construyen un modelo de barrera "semipermeable", que permite salir al talento interno, y no permite incorporarse al talento externo", advierten.
A su juicio, esta situación "empobrece objetivamente el capital humano y profesional, y marcha en sentido contrario a la universalidad científica y profesional de la medicina".
Por otro lado, hay que tener en cuenta que tener un marco común de diplomas que certifican los estudios y las licencias profesionales es "muy razonable". La competencia para la homologación de títulos de grado médico y de especialista ( en este caso extracomunitarios ) y el reconocimiento a efectos profesionales de los mismos vienen otorgados por RD al Estado central y con la participación de los Consejos Generales de las profesiones (en este caso la médica).
Lo contrario, según explican en un comunicado, " va en contra de los principios de equidad y no discriminación además de posible falta de competencia autonómica e incumplimiento por parte del Ejecutivo del reconocimiento expreso a los Consejos generales de las profesiones tituladas, colegiadas y reguladas de la Autoridad competente compartida que les asiste, tal y como se dicta en los RD legales y vigentes al efecto".
Otro argumento es la "imprescindible credibilidad de los títulos, diplomas y certificados"; así consideran que es conveniente para todos que, al existir un único espacio de praxis profesional, también se mantenga un único marco de titulación y homologación.
DELEGAR ESTA GESTIÓN EN EL CGCOM
Entiende que se solicite esta competencia de existir "falta de músculo de la Administración Central del Estado", que en su desarrollo produzca un "retraso excesivo e inapropiado", sin embargo recuerda que cuando la competencia de acreditar la formación continuada de profesionales sanitarios se residenció en las CCAA, nadie esperaba que algunas de ellas desatendieran la gestión de dicha función, hasta el punto de superar un año de demora.
Parecería que en este período post-crisis algunos procesos y funciones de la planificación y gestión profesional se revisaran, fortalecieran y mejoraran; si la Administración Central del Estado es capaz de garantizar un buen servicio, y reducir drásticamente las demoras en homologación de títulos (el tema de debate en esta ocasión), incrementando medios materiales y humanos a tal efecto, reivindicación manifestada de forma reiterada por todos los agentes, "lo lógico sería avanzar por esta senda y evitar aventuras peligrosas que nos lleven a una mayor fragmentación del mundo profesional de la medicina y las profesiones sanitarias".
Por tanto, desde el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos reiteran la necesidad de que se establezcan y se cumplan los requisitos para ejercer de médico en España, en cumplimiento de las normativas europeas y como ejercicio de seguridad asistencial y calidad profesional.
"La expedición, custodia y exigencia del título es fundamental para la profesión más regulada de Europa (la de médico), que no nos puede ser sustraída la capacidad ni podemos depender de nadie ajeno a las disposiciones estatales vigentes", señalan.
Ante esta situación, al igual que tienen encomendadas otras ordenes médicas europeas, entienden que dicha encomienda podría ser "delegada" al propio Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos de España, con la participación de todos los agentes del Foro de la Profesión Médica y en cumplimiento de su función estatutaria de ordenación y regulación de la profesión.