Los médicos buscan adaptar la ética médica a la "excelencia" que exige la sociedad actual

Actualizado: lunes, 23 mayo 2016 14:44


MADRID, 23 May. (EUROPA PRESS) -

Adaptar la ética médica a la "excelencia" que exige actualmente la sociedad; definir las competencias entre médicos, otros profesionales y los colegios para evitar conflictos; y que los colegios profesionales cumplan su función social ejerciendo la vigilancia deontológica con rigor y credibilidad para lo cual deben asumir el liderazgo ético que les corresponde, son algunas de las propuestas expresadas por los médicos en el III Congreso de Deontología Médica, organizado con el título 'Nuestra esencia y guía'.

"Es preciso adaptar la pujanza de la ética médica a los nuevos tiempos porque la sociedad demanda una excelencia que debe ser respondida. Los valores de la ética profesional, según puso de manifiesto, han debido conjugarse con nuevos valores y, de esta forma, la beneficencia y no maleficencia han sido superados porque la sociedad exige excelencia en nuestra labor", ha comentado el presidente del Colegio de Médicos de Alicante, José Pastor.

Asimismo, el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Juan José Rodríguez Sendín, ha mostrado su satisfacción porque la deontología haya pasado de pertenecer a "unos cuantos ilustrados" a impregnar lo más cotidiano de la actividad médica y, por ello, ha celebrado que la investigación y estudio de la ética estén cada vez más presentes en la vida diaria de los colegios. No obstante, ha avisado de que hay que hacer un esfuerzo para incorporarla al quehacer diario.

En este sentido, Rodríguez Sendín ha abogado por realizar una nueva definición de competencias entre profesionales sanitarios con redistribución y asignación de funciones y tareas asistenciales para evitar conflictos en la relación de los médicos entre sí y con otros profesionales sanitarios.

Partiendo de que todo se deber supeditar a la defensa a ultranza de los intereses del paciente y de que la profesión médica es la más regulada del mundo, en el tema de las relaciones con otros profesionales sanitarios, es preciso tener en cuenta la cadena de valor del sector sanitario en el que están incluidos los agentes -gobiernos, gestores, pacientes y profesionales-, las compañías de seguros, los proveedores -médicos, hospitales, centros y farmacia-, la distribución y los productores, entre los que se encuentran las compañías farmacéuticas", ha comentado.

Asimismo, del marco de competencias, tanto en procesos asistenciales como en las funciones, el presidente de la OMC ha destacado la necesidad de que esté "bien definido" para evitar conflictos y ha aludido a conceptos que se confunden en función de oportunidades o intereses políticos como, por ejemplo, "prescribir, dispensar o indicar".

Del mismo modo, Rodríguez Sendín se ha mostrado partidario de compartir conocimiento científico desde el convencimiento de que una técnica "no es exclusiva" de nadie y debe incorporarla cualquier médico con conocimiento suficiente si supone un beneficio para sus pacientes.

LIDERAZGO DE LOS COLEGIOS

Por su parte, el actual director de proyectos académicos de la Cátedra de Profesionalismo y Ética Clínica de la Universidad de Zaragoza, Rogelio Altisent, ha aseverado que los colegios deben ejercer el liderazgo de la ética médica de manera "inexcusable", ya ha recordado que el concepto de ética médica es un conjunto de valores y normas que definen la buena práctica profesional y que es lo que se denomina 'profesionalismo', que abarca la ética del ejercicio profesional y la Deontología.

Hablar de deontología, a su juicio, es hablar de "moralidad interna" de una determinada profesión, independientemente del respeto y el deber de cumplir*las normas legales, pero, tal y como ha comentado, es difícil entender que si los profesionales no están movidos por un sincero compromiso enraizado en la ética personal, "todo será papel mojado o, incluso, peor".

La discreción en el manejo de la información confidencial, el respeto hacia las preferencias del paciente, el esfuerzo en el deber del estudio y actualización permanente o la delicadeza en el trato humano de la relación clínica son rasgos que este experto ha nombrado como ejemplos característicos del buen comportamiento profesional que, sin embargo, serían "difícilmente exigibles" sólo por la vía legal en el día a día, aunque se pudiera sancionar a quien cometa fallos "muy graves".

"Del médico se espera un elevado nivel de exigencia moral, más allá de lo que dictan las leyes, y puso como ejemplo algunos deberes deontológicos recogidos en el Código de Deontología Médica como que un médico no debe criticar a otro delante de un paciente cuya asistencia comparten o que no es aceptable pedir pruebas molestas o de alto coste para un paciente, con la única finalidad de protegerse legalmente", ha zanjado.