MADRID 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
Según un nuevo estudio realizada por investigadores estadounidenses y publicado en la revista 'PLoS Medicine', en los países de bajos y medios ingresos las infecciones relacionadas con el embarazo son la principal causa de muerte materna, y también pueden ser fatales para el feto y el recién nacido. Estas infecciones son, en su mayoría, causadas por cuatro tipos de condiciones tratables y prevenibles.
Los autores, dirigidos por Michael Gravett y un equipo de investigadores de la Universidad de Washington, en Seattle, el PATH (Programa para una Tecnología Apropiada en Salud) y el GAPPS (Alianza Mundial para Prevenir la prematuridad y la muerte fetal), revisaron todos los estudios publicados con información acerca de infecciones maternas, prestando especial atención a los estudios llevados a cabo en África y Asia, con el fin de identificar las estrategias adecuadas para la detección de infecciones y proporcionar intervenciones eficaces.
Los resultados mostraron que la mayoría de enfermedades peligrosas relacionadas con el embarazo están causadas por infecciones en el tracto genital, el tracto urinario, los tejidos blandos, y las infecciones relacionadas con el aborto.
Los autores recomiendan que se integren intervenciones dirigidas a cada tipo de infección en los servicios de atención prenatal, sobre todo en la primera visita y al inicio del parto. También abogan por pruebas de diagnóstico y tratamientos asequibles dirigidos a las mujeres embarazadas en los puntos de atención para la salud.
Los autores señalan que "la revisión identificó cuatro síndromes clínicos, y microbios asociados con ellos, que parecen ser responsables de la mayoría de los casos de infecciones en el embarazo en los países de bajos y medianos ingresos. Cada uno de estos se produce en un momento distinto de la gestación, lo cual proporciona oportunidades para su detección y prevención".
Según el informe hay una gran necesidad de estudios integrales en países de bajos y medianos ingresos que exploren la epidemiología, los factores de riesgo y la microbiología de las infecciones que amenazan la vida materna. Sin esos datos, las mujeres seguirán siendo tratadas inadecuadamente y experimentarán una morbilidad potencialmente prevenible.