Mayor Zaragoza apela al conocimiento aplicado a la calidad de vida y no a la destrucción para superar las "crisis"

Actualizado: lunes, 11 mayo 2009 14:17

Recibe en San Sebastián la distinción oficial del COFG por su labor en el ámbito de la enseñanza de las ciencias farmacéuticas

SAN SEBASTIAN, 11 May. (EUROPA PRESS) -

El ex director general de la UNESCO y presidente de la Fundación para una Cultura de Paz, Federico Mayor Zaragoza, abogó hoy por "aportar conocimiento en aquellas áreas de las que depende la calidad de la vida humana", porque "ya está bien de aportarlo para la destrucción" y así se podrían lograr "auténticas revoluciones", con las que hacer frente a las "crisis económica, ética, de valores y de la democracia" por las que atraviesa nuestra sociedad.

Mayor Zaragoza compareció en San Sebastián, acompañado del presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Gipuzkoa (COFG), Francisco de Asis, antes de ofrecer la ponencia 'Salud, la gran prioridad' en el acto en el que se le hizo entrega de la distinción oficial del citado Colegio por su "labor en el ámbito de la enseñanza de las ciencias farmacéuticas", así como en el "fomento de la educación, cultura, investigación y la solidaridad intelectual".

El presidente de la Fundación para una Cultura de Paz lamentó "todas" las crisis en las que se ve inmersa la sociedad actual, "económica, ética, de valores, de la democracia". "Se han sustituido los valores de justicia social, de solidaridad por las leyes del mercado", censuró.

En este contexto, criticó que "se esté rescatando" a los que padecen la crisis económica, pero no a quienes "se mueren de hambre". "No había dinero para el hambre en el 2000, cuando las Naciones Unidas plantearon que era un problema de conciencia colectiva que diariamente se gastaran 3.000 millones de dólares en armas y no hubiera 6.000 millones anuales para actuar en favor de quienes tienen Sida, ni para las 60.000 personas que mueren de hambre todos los días".

"Sí existía dinero, se ha producido a raudales, cuando no existía para asistir a los que no tienen", incidió. En este marco, abogó por "luchar por ellos", en lo cual los farmacéuticos tienen "una posición de vanguardia", porque, por ejemplo, "gracias a ellos se conocen hoy muchos de los procesos vegetales que permiten obtener cosechas mejores con menos dispendio de agua".

"Hay que aportar conocimiento en aquellas áreas de las que depende la calidad de la vida humana, ya está bien de aportarlo para la destrucción", porque así se podrían lograr "auténticas revoluciones".

Preguntado sobre si su postura supondría abogar por los transgénicos como medida para acabar con el hambre en el mundo, Mayor Zaragoza, señaló que es "favorable a todo lo que va acompañado de rigor científico" y "contrario a aproximaciones políticas o eclesiásticas".

TRANSGENICOS

"Transgénicos si y no, depende de los casos y del resultado obtenido", apuntó Mayor Zaragoza. Además, recordó que "desde 1961 se usan en España semillas híbridas, que son transgénicos obtenidos por lo que se llama la 'prueba del error y del ensayo'", de manera que de los 65 tipos de trigo existentes entonces ahora "quedan cuatro, el resto se ha guardado". "Desde hace años hemos hecho una enorme selección genética y no ha pasado nada", concluyó.

Mayor Zaragoza recibió la distinción oficial del COFG, un alfiler de oro y un grabado de Eduardo Chillida, en el Palacio Miramar de San Sebastián, acompañado de la secretaria de la Junta de Gobierno del Colegio, María Angeles Arrazola, del presidente del Colegio, Francisco de Asís Echebeste, y otros cargos ligados al mundo de la farmacia.