MADRID 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las mujeres embarazadas con un índice de masa corporal (IMC) demasiado alto o demasiado bajo son más propensas a tener complicaciones, requerir atención adicional en el hospital e incurrir en mayores costes médicos, según un nuevo estudio publicado este miércoles en 'BJOG: An International Journal of Obstetrics and Gynaecology'.
La investigación se realizó en colaboración entre investigadores de las universidades de Edimburgo y Aberdeen, y de la División de Servicios de Información del sistema nacional de salud (NHS, en sus siglas en inglés) de Escocia. Usaron registros obstétricos de rutina en Escocia, entre 2003-2010, para investigar el impacto del IMC de las mujeres embarazadas en las complicaciones clínicas, el número y la duración de los ingresos hospitalarios y los costes sanitarios a corto plazo.
Las 109.592 mujeres embarazadas examinadas en el estudio fueron clasificadas en cinco categorías de IMC: bajo peso (IMC < 18,5), peso normal (IMC 18,5-24,9) sobrepeso (IMC 25-29,9), obesidad (IMC 30-35) y severamente obesas (índice de masa corporal > 35). El análisis mostró que el riesgo de complicaciones en la madre aumentó con el IMC y, en comparación con las mujeres de peso normal, las severamente obesas tenían un riesgo tres veces mayor de hipertensión (2,6 por ciento frente a 7,8 por ciento ) y diabetes gestacional (0,1 por ciento frente a 3 por ciento).
Además, en relación con las mujeres de peso norma , el resto de las categorías de IMC mostraron un aumento en la duración y el número de ingresos hospitalarios maternales necesarios después del nacimiento del bebé. Las mujeres con bajo peso registran un incremento del riesgo de ingreso de un 8 por ciento, mientras que el riesgo de las que tienen sobrepeso, obesidad y obesidad severa creció mucho más, un 16, 45 y 88 por ciento, respectivamente.
Los gastos de maternidad adicionales para las mujeres con alto o bajo índice de masa corporal también fueron superiores en comparación con el costo de los servicios de salud materna estándar para las de peso normal. El coste adicional estimado para las embarazadas con bajo peso fue de 102,3 libras (121,6 euros), las mujeres con exceso de peso 59,9 libras (71,2 euros) y las mujeres obesas y severamente obesas 202,5 (240,8 euros) y 350,8 libras (417,2 euros), respectivamente.
"Nuestros datos demuestran que tanto un IMC alto y bajo materno se asocia con un mayor riesgo de complicaciones durante el embarazo, un aumento del número y la duración de los ingresos maternos y mayores costos para los servicios de salud", destacó Fiona Denison, del Centro Tommy para la Salud Maternal y Fetal del Centro MRC de Salud Reproductiva, del 'Queens Medical Research Institute de Edimburgo', y coautora del trabajo.