MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, ha explicado este martes que la reciente reforma sanitaria aprobada por el Gobierno va a hacer que España deje de ser "una especie de meca de los trasplantes para todo el mundo", como lo era hasta ahora debido a lo relativamente sencillo del acceso a las listas de espera.
Matesanz, que ha intervenido en la 'IX Reunión de Comunicación en Donación y Trasplantes', organizada por la Consejería de Sanidad de Aragón en colaboración con la ONT, ha admitido en declaraciones a Europa Press que hasta ahora "había gente que venía a España específicamente a hacerse un trasplante. No ha sido un número muy grande y es difícil de evaluar porque la gente que accede al sistema lo hace con tarjeta sanitaria española", pero el caso es que era un fenómeno en crecimiento.
Así, destaca que "España es una especie de meca de los trasplantes para todo el mundo, y eso tiene sus ventajas para los pacientes españoles, pero también inconvenientes, porque pacientes de todo el mundo quieren venir aquí, y en los últimos años se ha registrado un aumento de enfermos que se inscriben en cualquier ciudad ya que esto les permitía un acceso bastante sencillo a las listas de espera".
Todos los servicios de salud han detectado que en los últimos años se ha producido en España un aumento del número de pacientes de otros países que venían específicamente a trasplantarse, señala Matesanz que, aunque insiste en que "no ha sido masiva y ha habido otros países con leyes más permisivas que han recibido más pacientes", sí se ha constatado que en muchas listas de espera de riñón o hígado sobre todo, ha habido gente que ha venido a España sólo a trasplantarse.
Se trata de personas que posiblemente han intentado hacerlo por la vía oficial pero al denegárseles el acceso por escasez de órganos, llegan a España desde otros países, tanto la Unión Europea como de África, específicamente para trasplantarse.
Por ello, considera que una de las cosas positivas del real decreto de reforma sanitaria aprobado por el Gobierno este martes es que "pondrá orden en este tema, que iba creciendo".
Matesanz precisa que no hay ningún problema en trasplantar gente no nacida en España, "pero que esté viviendo en España porque la gente que vive en España dona órganos y los recibe, pero ningún país del mundo puede abastecer a gente que venga de forma indiscriminada", acota.
Las nuevas medidas gubernamentales, en su opinión, pueden limitar y controlar este fenómeno creciente y racionalizar la lista de espera porque quienes vienen de fueran acaba compitiendo con los españoles o los extranjeros que residen en España. "No es un problema de españolidad, sino de que forme parte de la comunidad que vive y trabaja en España", explica.