MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
El sindicato de enfermería SATSE ha denunciado que más de 15.000 camas se han cerrado este verano en los distintos centros sanitarios de España, según sus estimaciones, "como consecuencia de los recortes estivales que han supuesto, un año más, menos servicios y profesionales para atender a los ciudadanos".
Este recorte, realizado por las distintas administraciones sanitarias cada año, viene a afectar directamente al pacientes y personal sanitario, y se suma al aumento de las esperas, altas precipitadas o saturación de las Urgencias.
Además, alerta de que "este año es que en algunas comunidades autónomas el cierre de camas empieza antes". Esta situación, que califica de "muy preocupante", se ha llegado a iniciar en algunas comunidades en el mes de junio, "y se prevé que se alargue hasta el mes de noviembre, contradiciendo el argumento dado por las propias administraciones de que se ajustan recursos y plantillas por las vacaciones".
Los datos recopilados por SATSE concluyen que se cerraron en torno a 15.000 camas, aunque el sindicato se muestra convencido de que pueden ser más, "porque este año la opacidad de algunas Administraciones y gerencias a la hora de dar los datos ha sido mayor si cabe, y de algunos centros concretos directamente no se han facilitado".
Algunos ejemplos son los de Andalucía con 2.900 camas cerradas; Madrid con 1.800; Baleares con 300 camas; País Vasco con cerca de 1.200; Castilla-La Mancha con más de 900 camas, o Castilla y Léon con también unas 900 camas.
Los "síntomas" de este mal generalizado no se han hecho esperar y el cierre de camas ya está provocando, entre otras graves consecuencias, el aumento de las listas de espera, tanto médicas como quirúrgicas, las altas de forma precipitada, y el amontonamiento de pacientes en Urgencias, obligando a los profesionales a atenderlos, en muchos casos, en los pasillos.
En su opinión, "el cierre de camas en los centros hospitalarios ha aumentado el índice de enfermos desplazados que no pueden ser atendidos en la unidad correspondiente a su patología, y que, por tanto, son vistos por profesionales no especializados".
Además, "los centros hospitalarios cuentan con un menor número de profesionales, al no producirse prácticamente sustituciones de las personas que se van de vacaciones".
Para la organización sindical este déficit muestra que "los gestores sanitarios han vuelto a primar los intereses de ahorro económico a los generales de ofrecer, también en verano, la mejor atención posible al ciudadano".
REDUCCIÓN DEL NÚMERO DE MÉDICOS
Precisamente, la pasada semana el Foro de Médicos de Atención Primaria califica de "alarmante" la reducción del número de sustituciones médicas durante el verano ya que, nuevamente, la distintas autonomías han decidido rebajar el número de profesionales que atienden a la población en el período estival, lo que a la larga podría tener consecuencia la para la salud del profesional y de la población. Por tanto, apelan a las autoridades sanitarias a que se revierta dicha situación.
Esta situación "tendrá una consecuencia directa sobre la calidad asistencial para el paciente", que "no tiene más remedio que sufrir una merma aunque el profesional se vuelque", explicaba a Europa Press el secretario de Atención Primaria de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), el doctor Salvador Galán, quien además advertía de que, "debido a que las condiciones laborales no son las idóneas", la situación también repercutirá en la salud del profesional debido a que "sufrirá reiteradamente jornadas agotadoras".
El informe, que ha sido realizado por la organización sindical para uso interno y que pretende mostrar la situación en distintas comunidades autónomas - Galicia, Castilla y León, Castilla-La Mancha Madrid, Murcia, Andalucía, Comunidad Valenciana y Cataluña--, se presentó durante la reunión que mantuvieron los responsables del Foro de médicos de Atención Primaria.