OVIEDO 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
La directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional 2009, afirmó hoy que la salud es un factor directamente vinculado con la riqueza y la posibilidad de desarrollo de un país. "La gente sana contribuye a la riqueza de un país", aseveró.
Así, explicó que los Servicios Sociales son fundamentales y lamentó que se considere la salud como un gasto, a la vez que reiteró que "la buena salud y la riqueza están vinculados".
En este sentido, recordó que hace unos 30 años hubo una crisis energética y económica a nivel internacional en la que varios países optaron por ajustar sus presupuestos recortando en Servicios Sociales, principalmente en salud y educación. "Treinta años después siguen sufriendo las consecuencias de esa decisión equivocada", apuntó.
Margaret Chan, que recogerá mañana el premio en el Teatro Campoamor de Oviedo, realizó estas declaraciones durante la rueda de prensa que ofreció hoy en el Hotel de La Reconquista.
Además, remarcó que aunque reconoce que "no es fácil" dirigir un país "los gobiernos existen para servir", por lo que entiende que "si no son capaces" de dar cobertura sanitaria y educativa "faltarán" personas para llevar las riendas de los países en el futuro.
Chan también destacó en su intervención la cooperación internacional es "más relevante que nunca", al igual que la solidaridad de los países más desarrollados con los menos privilegiados. "Es un gran honor que nuestra labor sea reconocida", añadió en relación a la actividad multilateral que desarrolla la OMS y los 193 países miembros.
Sobre las dificultades de financiación de las políticas sociales y sanitarias, Chan reiteró que a pesar de que falten recursos para cubrir la demanda, tanto la OMS como cualquier gobierno deben seguir trabajando con "eficacia" para conseguir los mejores resultados posibles. "No hay mucho dinero, pero la salud es importante", apuntilló.
ERRADICAR NUEVAS ENFERMEDADES
Margaret Chan apuntó que la OMS continúa centrando sus esfuerzos, junto con el compromiso de los países miembros y de personas con talento, para seguir erradicando nuevas enfermedades, como ya se logró con la viruela o está a punto de conseguirse con la poliomelitis.
Asimismo, comentó que ahora se abordan tanto enfermedades transmisibles como las crónicas o vinculadas a hábitos, tales como la obesidad, cardiopatías, o la diabetes. "Las dolencias asociadas al estilo de vida son difíciles de controlar", señaló recomendando una labor conjunta para mejorar la educación sociosanitaria.
También hizo hincapié en que hay un dilema que hay que abordar en el marcho del desarrollo de los objetivos del milenio. Del mismo modo, instó a que se solucione el dilema de la existencia de población con obesidad en los países desarrollados a la vez que hay países donde sus habitantes no tiene qué comer.