MADRID 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
CESM-Médicos de Madrid y las sociedades científicas de Pediatría han exigido a la Consejería de Sanidad y Consumo el pago de los turnos adicionales que hacen estos profesionales bien como horas ordinarias de trabajo bien a través del establecimiento de un concepto nuevo como productividad cuando se trata de la jornada de un compañero del mismo turno.
De esta forma se pretende acabar con la situación actual, según la cual la falta de pediatras en el nivel de Atención Primaria de la región da lugar a soluciones que se articulan "para salir del paso" y se compensan de forma "dispar", según informó hoy la organización sindical.
Desde CESM-Médicos de Madrid se advierte que, de hecho, "ante las frecuentes necesidades de duplicación de la jornada laboral, unas veces se ofrecen días libres, otras se pagan como atención continuada, y en el peor de los casos se reparten los pacientes entre los pediatras presentes y no se compensa de ninguna manera la sobrecarga de trabajo".
De ahí el acuerdo de colaboración alcanzado ayer entre este sindicato médico y las sociedades científicas de la Comunidad de Madrid en el ámbito de la Pediatría --la Asociación Madrileña de Pediatría de Atención Primaria (AMPap) y la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (Madrid-Castilla-La Mancha)--.
El compromiso asumido por CESM-Médicos de Madrid es trasladar a la Mesa Sectorial de Sanidad todos aquellos acuerdos previamente consensuados con las citadas sociedades científicas referidos a estabilidad en el empleo, sistema de selección que se desarrolle en el Estatuto Marco de Madrid y, en general, todos los aspectos que puedan incidir en la actividad profesional de los médicos pediatras de Atención Primaria.
FALTA DE PEDIATRAS
En concreto, para paliar la falta de pediatras han preparado una batería de peticiones a medio plazo tales como establecer un límite de 30 pacientes por día como tope máximo, para que no se afecte la calidad asistencial; potenciar turnos de trabajo que permitan conciliar la vida familiar y laboral; homogeneidad entre los equipos de los distintos turnos; potenciar los turnos bisagra (11 a 18 horas) para evitar las peticiones de media jornada; y la incorporación de los residentes de Pediatría, durante su formación, a los centros de salud, según un programa preestablecido.
Tanto las sociedades científicas como la organización sindical han ofrecido a la Consejería su colaboración para abordar el estudio de las circunstancias que han llevado a esta carencia de profesionales de la Pediatría.
Desde CESM-Médicos de Madrid se advierte que se trata de un problema "muy complejo" que "obedece a factores muy dispersos, pero que tienen que ver con la poca disposición de los MIR recién formados a trabajar en Atención Primaria, por sus malas condiciones de trabajo (consultas saturadas, imposibilidad de acceso a la formación continuada), y la demanda de profesionales por la oferta de plazas en los nuevos hospitales de la Comunidad de Madrid o las jubilaciones en cascada que se están produciendo en grandes hospitales como La Paz, el Doce de Octubre o el Niño Jesús".